Ciudad de México, 4 nov (EFE).- Especialistas de la American Chamber of Commerce (AmCham) en México y de la agencia Moody’s expresaron este jueves sus dudas de que el país alcance la meta de crecimiento oficial superior al 6 % tras la última caída trimestral del PIB.
Luis Foncerrada, asesor económico de AmCham México, se refirió en el «Foro Económico 2021» organizado por la cámara a la caída trimestral de 0,2 % del PIB de julio a septiembre que estimó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) la semana pasada.
“Pensábamos que podíamos crecer más del 6 %, me parece que eso ya es una cifra que no podremos lograr. (En) las expectativas de los especialistas del sector privado que llenamos la encuesta del Banco de México, más de la mitad piensan que no podremos llegar al 6 %”, expuso en el evento.
Además de más de 3,8 millones de contagios y casi 289.000 muertes por covid-19, la cuarta cifra más alta del mundo, la pandemia dejó una contracción histórica de 8,2 % del PIB en 2020.
El Gobierno de México tiene la expectativa oficial de crecer 6,3 % este año, anclado en particular al comercio exterior y el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Sin embargo, el experto de AmCham apuntó a la caída del consumo en el tercer trimestre, la brecha laboral de 17,5 millones de empleos que requiere la economía y la inflación general que acumula un aumento anual de 6 %, el doble de la meta oficial de Banco de México.
“Si a la falta de empleo y de inversión agregamos la inflación, pues tenemos un escenario indudablemente preocupante”, manifestó.
Carlos Diaz de la Garza, director general de Moody’s México, recordó que el pronóstico del PIB de la agencia es cercano al 5,5 %, por debajo de la meta oficial, mientras que para 2022 oscila entre 3,5 % y 4 %.
Con este ritmo de crecimiento, advirtió, la economía mexicana no recuperaría su nivel prepandemia hasta 2023.
“La gran mayoría de los países van a llegar a los mismos niveles en el 2022, entonces México trae un retraso”, indicó.
El especialista advirtió de la percepción de riesgo generada por la propuesta de reforma eléctrica del Gobierno, que limitaría a 46 % la participación privada en la generación de electricidad, y los apoyos a Petróleos Mexicanos (Pemex).
“El gran riesgo que se ve desde fuera tiene mucho que ver con la política y el gasto público del Gobierno federal, ahí hay sectores que preocupan, como puede ser el apoyo incondicional del Gobierno federal a Pemex», señaló.
En contraste, el presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM) consideró viable el crecimiento del 6 %.
Aun así, lamentó que la inversión pública y privada sea menor a 19 % del PIB.
“Nos parece en la parte de inversión, tanto en sector público como privado, sería muy deseable llegar al 25 % (del PIB), que eso le daría un dinamismo a la economía distinta y además eso traería mejor elementos de empleo”, observó.