Buenos Aires, 21 ago (EFE).- Argentina anunció este viernes que ha concedido la autorización para realizar en el país suramericano ensayos clínicos de fase III de la vacuna para COVID-19 desarrollada por la farmacéutica china Sinopharm.
Según informaron fuentes oficiales, los ensayos clínicos, aprobados por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) de Argentina, se llevarán adelante en conjunto con el laboratorio local Elea Phoenix.
«Estamos muy orgullosos de este logro en el que las partes hemos comprometido todo el esfuerzo para que podamos avanzar en forma conjunta y solidaria para obtener vacunas a disposición de nuestro pueblo», señaló el ministro de Salud argentino, Ginés González García, al anunciar la aprobación de los ensayos de fase III.
Por su parte, el presidente de Sinopharm Group, Liu Youg, reveló que las conversaciones con las autoridades argentinas se iniciaron en junio pasado.
«Aunque China y Argentina están separadas por un océano, están profundamente conectadas de corazón a corazón frente a la pandemia y estamos luchando lado a lado y avanzando hacia el mismo camino», sostuvo.
El pasado martes, el presidente de China National Biotec Group, integrante del grupo Sinopharm, Liu Jingzhen, aseguró que la vacuna, desarrollada conjuntamente con el Instituto de Productos Biológicos y Virología de Wuhan y la Academia China de Ciencias y que ya se prueba en fase III en Emiratos Árabes Unidos, estará lista «probablemente» para diciembre.
Según un estudio publicado esta semana en The Journal of the American Medical Association con base en los ensayos clínicos de las fases I y II, «la vacuna candidata de Sinopharm es segura y genera una respuesta inmune».
Sinopharm inauguró en junio un complejo farmacéutico en la ciudad de Wuhan para la investigación, el desarrollo y la producción de la vacuna con el objetivo de doblar su capacidad productiva.
Argentina ya forma parte, junto con Estados Unidos, Alemania y Brasil, de los ensayos clínicos de la vacuna contra la COVID-19 elaborada por la farmacéutica estadounidense Pfizer y la alemana BioNTech.
Por otra parte, el país suramericano ha anunciado recientemente que, junto a México, producirá para Latinoamérica la vacuna desarrollada por el laboratorio AstraZeneca en colaboración con la universidad británica de Oxford.