Buenos Aires, 16 dic (EFE).- Argentina y Chile alcanzaron este miércoles un acuerdo para modificar las condiciones que rigen el comercio de automóviles entre ambos países, informaron fuentes oficiales.
Según explicó la Cancillería argentina en un comunicado, ambos países acordaron modificar el régimen de origen aplicable al comercio bilateral del sector automotor, cuya entrada en vigor se prevé para marzo próximo.
El régimen vigente establece en un 60 % el porcentaje de componentes de fabricación argentina que un auto debe tener para ser eximido del pago de aranceles externos a la hora de ser exportado a Chile.
Tras nuevas negociaciones, ese índice bajará al 50 %, lo que le permitirá a Argentina incrementar sus ventas de vehículos a Chile en unas 10.000 unidades al año.
De acuerdo a datos de la Asociación de Fábricas de Automotores de Argentina (Adefa), entre enero y noviembre pasado Argentina exportó a Chile 6.551 vehículos, lo que implica 4.903 unidades menos que en igual período de 2019.
El mercado chileno representa un 5,4 % del volumen de las exportaciones argentinas de autos, cuyo mayor destino es Brasil.
Según destacó la Cancillería argentina, el nuevo régimen alentará «un incremento sustantivo de los flujos comerciales bilaterales con miras a potenciar el comercio y las inversiones bilaterales, y a fin de avanzar en el encadenamiento productivo regional».
Desde 1996 el Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) y Chile cuentan con un acuerdo comercial exhaustivo que en 2014 alcanzó las condiciones de libre comercio de bienes.
En 2019 Argentina y Chile ampliaron ese acuerdo, incluyendo nuevas disciplinas como contratación pública, servicios, comercio y pymes, entre otras.
«Este acuerdo se enmarca en el profundo vínculo que sostiene la Argentina con el país hermano y que se ha traducido además en la cooperación para la reciente apertura de pasos fronterizos para el retorno de 500 argentinos y residentes aislados por la pandemia», recordó el Gobierno de Alberto Fernández.
También resaltó la eliminación del «roaming» en las llamadas telefónicas en ambos países, el fomento de los corredores bioceánicos, el trabajo científico conjunto en la Antártida y la validez de los registros de conducir de ambas naciones, entre otros puntos.
