Ciudad de México, 31 ago (EFE).- El Banco de México (Banxico) mantuvo este miércoles en 2,2 % su pronóstico de crecimiento del producto interior bruto (PIB) mexicano en 2022, pero elevó a 8,1 % su previsión de la inflación general para el último trimestre del año desde una estimación previa de 6,4 %.
En su «Informe trimestral abril-junio 2022», el banco central estimó un escenario central de crecimiento de 2,2 % con un límite inferior de 1,7 % y uno superior de 2,7 %, cifras similares al reporte anterior, cuando proyectó un piso de 1,6 % y un techo de 2,8 %.
Pero el organismo autónomo disminuyó a 1,6 % su proyección central del PIB para 2023, desde una estimación anterior de 2,4 %.
«La revisión para 2023 refleja el escenario más adverso que se espera que la economía mexicana enfrente para su crecimiento», expuso el banco central.
Por el otro lado, la Junta de Gobierno de Banxico elevó su pronóstico de la inflación general, que ahora promediaría un 8,1 % anual en el último trimestre de 2022, frente a la previsión pasada de 6,4 %.
El banco central espera que la inflación general anual alcance su «pico» en el tercer trimestre de este año, cuando promediaría 8,5 %, casi el triple de la meta de Banxico de 3 %, para después descender en lo que resta de 2022 y a lo largo de 2023.
«Se prevé que tanto la inflación general como la subyacente, luego de aumentar en el 3T-2022 (tercer trimestre de 2022), vayan disminuyendo a lo largo del horizonte de pronóstico, de modo que se ubicarían en niveles cercanos a 3 % en el 1T-2024 (primer trimestre de 2024)», previó el organismo.
Con este contexto, Banxico justificó su política monetaria, que el 11 de agosto resultó en elevar la tasa de interés al 8,5 %, lo que representa el décimo incremento consecutivo del objetivo ante la inflación general, que alcanzó el 8,62 % anual en la primera quincena de agosto, su nivel más alto desde 2022.
Los pronósticos llegan después de que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) divulgó la semana pasada que el PIB creció un 0,9 % trimestral entre abril y junio de 2022, con lo que acumula un crecimiento de 1,9 % anual.
México no ha recuperado su nivel económico previo a la pandemia tras un desplome histórico de 8,2 % del PIB en 2020 y un repunte de apenas 4,8 % en 2021.
Como riesgos al alza, el banco enunció la persistencia de la inflación subyacente en niveles elevados, presiones inflacionarias externas asociadas a la evolución de la pandemia y mayores presiones sobre los precios derivadas del conflicto geopolítico en Ucrania, en particular sobre alimentos y energéticos.
También vislumbró episodios de depreciación cambiaria y presiones por mayores costos asociados a las condiciones de contratación o salarios.