La Paz, 21 nov (EFE).- El Gobierno de Luis Arce prevé que la economía boliviana crecerá un 4,86 % en 2023 y se registrará una inflación de 3,57 %, según el proyecto del Presupuesto General del Estado (PGE) presentado este lunes.
Los datos fueron dados a conocer por el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, quien informó que el proyecto de ley del PGE ya fue enviado a la Asamblea Legislativa para su respectivo tratamiento.
«Los principales supuestos del PGE en términos macroeconómicos son una tasa de crecimiento de 4,86 %, una tasa de inflación de 3,57 %, en el balance fiscal un déficit de 7,49 % y en términos de tipo de cambio promedio, mantener la política cambiaria que hemos venido manejando a lo largo de estos años», precisó Montenegro.
Además se prevé una inversión pública equivalente a 4.006 millones de dólares, de los que el 42 % se destinará al sector productivo.
El presupuesto del próximo año apunta a cumplir cinco objetivos, comenzando por «garantizar la estabilidad macroeconómica y la sostenibilidad de las finanzas públicas», señaló el ministro.
También se busca «profundizar» el «modelo económico social comunitario productivo» puesto en marcha por el gubernamental Movimiento al Socialismo (MAS) «basado en la industrialización con sustitución de importaciones», dijo.
Además, el Ejecutivo nacional se planteó para la próxima gestión «fortalecer el aparato productivo con políticas de incentivo que mejoren la productividad en el país».
El cuarto objetivo es mantener las políticas sociales para la «redistribución del ingreso y los excedentes» y el quinto apunta a «consolidar la política de acceso universal y gratuito a la salud y educación», añadió la autoridad.
Según Economía, el presupuesto para educación equivaldrá al 10,8 % del total, salud recibirá el 10,1 % y Defensa tendrá un 1,8 %, entre otros sectores.
El Ejecutivo nacional proyectó cerrar el año con un crecimiento de 5,1 %, aunque analistas han alertado de que no se alcanzará ese porcentaje por los conflictos por el censo de población que se mantienen sobre todo en Santa Cruz, el motor económico del país que está en huelga indefinida desde hace 31 días.
En octubre pasado, el Gobierno informó que el producto interior bruto (PIB) del país creció un 4,13 % en el segundo trimestre de este año, lo que «ratifica» la recuperación de la economía, pero fue insuficiente para el pago del segundo aguinaldo navideño a los trabajadores.
El doble aguinaldo navideño se otorga a trabajadores del sector privado y público en Bolivia cuando el crecimiento económico del país supera el 4,5 % de julio de un año a junio del siguiente.