Río de Janeiro, 2 dic (EFE).- El Gobierno brasileño divulgó este miércoles una lista de 115 activos que pretende privatizar u ofrecer en concesión en 2021 y que incluye el gigante eléctrico Eletrobras y la empresa de Correos, luego de que la pandemia del coronavirus prácticamente paralizara el proceso de privatizaciones en 2020.
La lista de activos privatizables fue divulgada por el Consejo del Programa de Asociaciones en Inversiones (PPI) del Ministerio de Economía, que calcula que su entrega a manos privadas puede generar inversiones por 367.000 millones de reales (69.245 millones de dólares).
El anuncio fue hecho tras una reunión del Consejo que contó con la participación del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, y de su ministro de Economía, Paulo Guedes, ambos defensores de una política económica liberal y de una ambiciosa reducción del tamaño del Estado mediante la venta de estatales y la concesión de servicios públicos a la iniciativa privada.
Además de Eletrobras y de la empresa de Correos, cuyas ventas estaban previstas para este año pero fueron aplazadas debido a que dependen de la aprobación del Congreso, la lista incluye otras siete empresas controladas directamente por el Gobierno federal como la Agencia Brasileña Gestora de Fondos Garantizadores y la Empresa Gestora de Activos.
Igualmente serán ofrecidas la Compañía de Abastecimiento de Minas Gerais, la Empresa de Trenes Urbanos de Porto Alegre, la Compañía Brasileña de Trenes Urbanos de Minas Gerais y Nuclebras Equipos Pesados.
La lista incluye igualmente 16 puertos cuya operación será ofrecida en concesión, incluyendo los de Santos, el mayor de América Latina, y Paranagua, así como de seis carreteras federales, incluyendo la que conecta las ciudades de Sao Paulo y Río de Janeiro, una de las más importantes del país.
También se prevén subastas para ofrecer en concesión 24 aeropuertos, entre ellos el de Viracopos, que es una de las mayores terminales de cargas del país y que fue devuelto por el operador que se lo había adjudicado, y los de Santos Dumont y Congonhas, respectivamente los terminales para vuelos regionales de Río de Janeiro y Sao Paulo.
El Gobierno también pretende realizar en 2021 al menos dos subastas para ofrecer derechos para explorar y explotar petróleo y gas en áreas marinas, incluso algunas en el presal, el horizonte de explotación en que Brasil descubrió gigantescas reservas.
En la lista figuran seis parques y áreas forestales que serán ofrecidas a empresas interesadas en prestar servicios de turismo ecológico.
La secretaria especial del PPI, Martha Seillier, aseguró que la privatización más aguardada es la de Eletrobras, la mayor generadora de energía del país y una de las mayores transportadoras eléctricas, por cuyo control el Gobierno espera recibir hasta 60.000 millones de reales (11.320,7 millones de dólares).
Admitió que su venta depende de un proyecto de ley que está en discusión en el Congreso pero que es de interés de los parlamentarios debido a que prevé millonarias inversiones en la modernización del parque de energía del país que el Estado no tiene condiciones de financiar.
Por el modelo de venta aprobado, Eletrobras, controlada por el Estado pero con acciones en bolsa, promoverá un aumento de capital del que el Gobierno se abstendrá de participar y que permitirá que los accionistas privados pasen a ser mayoritarios.
Seillier afirmó que la venta de todos los activos incluidos en la lista es viable y que no debe generar otra decepción como la admitida el mes pasado por Guedes, quien manifestó su frustración con el ritmo del proceso de privatizaciones y su total paralización en 2020.
«Todo lo que está en la lista es viable. Algunos proyectos pueden escurrirse para 2022 pero lo importante es nuestro compromiso de entregar todos esos activos y de atraer inversores privados que quieran adquirirlos y operarlos en concesión o en asociación», dijo.