Santa Cruz (Bolivia), 24 oct (EFE).- La población boliviana comenzó a sentir este lunes los primeros efectos del tercer día de paro por el censo en Santa Cruz, el motor económico del país, donde se reportaron varios camiones cisterna varados y el riesgo de un posible desabastecimiento de carburantes.
En ciudades como La Paz y la central Cochabamba se registraron algunas filas en las gasolineras por la incertidumbre que causó la advertencia de organizaciones sociales afines al Gobierno de cercar Santa Cruz si es que no se levanta el paro en esa región.
Algunas de las personas admitieron que fueron a las estaciones de combustible «por si las dudas», en caso de que haya desabastecimiento debido al paro indefinido que tiende a extenderse.
El presidente de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, pidió que el paro en Santa Cruz cese para evitar «un posible desabastecimiento de combustible» en ese departamento.
«Necesitamos que los bloqueos cesen para que se pueda abastecer con normalidad a todo el departamento con combustible», sostuvo.
Además, Dorgathen pidió que se dejen circular a los camiones cisterna y denunció que más de 45 de estos fueron detenidos por varias horas por los bloqueos en las localidades cruceñas de Camiri y Cotoca, con condiciones de calor que pueden generar accidentes.
«Todo bloqueo en las rutas de Santa Cruz hacia Puerto Quijarro y desde Camiri al sur de Bolivia afecta directamente a la logística de cisternas, pues por día se mueven centenares de estas unidades en esas rutas, tanto de ida como de vuelta», señala un comunicado de YPFB.
Cerca a la refinería Guillermo Elder Bell, en Santa Cruz, se produjeron largas filas de decenas de camiones cisterna que no pueden circular por los bloqueos, por lo que YPFB anunció un plan de contingencia.
Por su parte, la Agencia Nacional de Hidrocarburos comunicó que «el abastecimiento de combustibles líquidos, gas natural y gas licuado de petróleo en todo el territorio nacional se encuentra garantizado».
Aunque señala que en Santa Cruz «se corre el riesgo en la continuidad del abastecimiento» como consecuencia del paro indefinido.
Ante la susceptibilidad en algunas regiones, YPFB informó que La Paz «no tiene problemas de abastecimiento de combustibles» ni tendrá, ya que los puntos de importación de gasolina y diésel para el occidente del país no sufrieron alteración alguna.
Santa Cruz cumple su tercer día de paro indefinido exigiendo al Gobierno que el censo de población y vivienda, que debía ser en noviembre de este año, se realice en 2023 y no en 2024.