Quito, 3 jun (EFE).- El Frente Unitario de Trabajadores (FUT), la mayor coalición obrera de Ecuador, expresó su temor de que el presidente conservador Guillermo Lasso intente pasar eventuales decretos impopulares, en el marco de la «muerte cruzada» que supuso la disolución del Parlamento y el adelanto de las elecciones.
El FUT, que el sábado desarrolló una convención de sus bases, indicó este domingo que ha resuelto ratificar su postura contra las políticas neoliberales que pudiera decretar Lasso, como las privatizaciones o reformas que impliquen una precarización laboral.
«Alertamos a la Corte Constitucional, controlar y revisar todos los decretos que está enviando el Gobierno como urgentes económicos, que atenten contra el pueblo ecuatoriano y los trabajadores», indicó en un comunicado la Cedocut, una de las centrales que integran el FUT.
Ello en referencia a que el decreto de «muerte cruzada» que Lasso aplicó el pasado 17 de mayo, además de disolver la Asamblea Nacional (Parlamento) y adelantar las elecciones, le permite ejercer a través de decretos ejecutivos que deben ser revisados por la Corte Constitucional.
El próximo 20 de agosto se celebrarán las elecciones extraordinarias para elegir al sucesor de Lasso y a los nuevos 137 integrantes de la Asamblea Nacional, que completarán el periodo y ejercerán sus funciones hasta mayo de 2025.
Además de los sindicatos, también la Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie) ha advertido con protestas si el mandatario aplicara decretos contra la seguridad social, la flexibilización laboral o la privatización de áreas estratégicas del Estado como la energía.
Por ello, en la convención del FUT se ha resuelto, entre otras cosas, defender al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) y exigir que el Gobierno pague una multimillonaria deuda con esa entidad, cuyos servicios se han deteriorado en los últimos años.
La central obrera ha hecho un llamamiento a la unidad a otras organizaciones sociales con el objetivo de defender los derechos colectivos y oponerse a eventuales decretos neoliberales. EFE
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