Madrid, 15 nov (EFE).- Chile, Colombia y Perú publican esta semana la evolución de sus economías en el tercer trimestre del año, en el que los expertos consultados por Efe prevén que registren tasas elevadas de crecimiento después del hundimiento vivido entre abril y junio a causa de las restricciones impuestas por la pandemia de coronavirus.
«Todos van a tener variaciones importantes positivas. Seguro rebotarán todos», a la vista de la marcha de algunos indicadores adelantados, señala a Efe el profesor de la escuela de negocios IE Business School Germán Ríos.
En Chile, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha elevado su previsión sobre la evolución económica del país, ya que los indicadores de corto plazo están cambiando, recuerda.
Ríos apunta que en Colombia los datos de consumo de las grandes ciudades muestran que la economía se reactiva, mientras que en Perú las restricciones implantadas no han sido muy fuertes, lo que favorece un rebote de la actividad.
El investigador principal para América Latina del Real Instituto Elcano (RIE), Carlos Malamud, coincide y señala que «todas las estimaciones pronostican una mejora» de las cifras, aunque advierte de que, pese a las esperadas subidas, los PIB seguirán por debajo del nivel que tenían el año pasado.
Entre abril y junio, una vez corregidos los efectos estacionales, los PIB chileno y colombiano cayeron frente al primer trimestre el 13,2 % y el 14,9 %, respectivamente, lastrados por el hundimiento de prácticamente todas las ramas de actividad (solo crecieron y con poco empuje los servicios financieros, la administración pública, la agricultura y la minería -en Chile-).
Perú registró un descenso del PIB respecto a los tres primeros meses del año del 27,2 %, corregido el efecto calendario, con caídas de dos dígitos en todos los sectores.
El efecto rebote en las economías durante el tercer trimestre ya se ha visto en los países desarrollados y también en México, el único gran país latinoamericano que ya ha difundido los datos de ese periodo.
El PIB mexicano subió el 12 % entre julio y septiembre (un 22 % eliminado el efecto coyuntural del calendario) tras la histórica caída del 18,7 % del segundo trimestre, con repuntes tanto en industria como en servicios y agricultura.
Sin embargo, en comparación interanual la economía de México quedó todavía un 8,6 % por debajo de la del primer trimestre del año pasado.