Quito, 19 ene (EFE).- Cientos de trabajadores se manifestaron este jueves por las calles del centro de Quito para defender el modelo público de la seguridad social ecuatoriana, exigir la salida de sus principales directivos y protestar contra la comisión formada por el Gobierno para evaluar el sistema de pensiones.
La movilización, convocada por el Frente Unitario de Trabajadores (FUT), la mayor central sindical del país, comenzó frente a la sede del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) y se trasladó hacia el centro histórico de la capital de Ecuador.
La pertinaz lluvia que cayó en la tarde de este jueves en Quito no fue impedimento para que los sindicatos se concentrasen y expresasen su rechazo a las intenciones del Gobierno de aplicar reformas al IESS con el objetivo de dotarle de mayor sostenibilidad y estabilidad financiera.
En un pronunciamiento, la presidenta del FUT, Marcela Arellano, lanzó un recordatorio al Ejecutivo en el que aseveró «que el IESS no se vende, que el IESS es de los trabajadores» y auguró que la comisión formada por el Gobierno va a atentar contra los derechos de los trabajadores.
Esa comisión ciudadana, liderada por el economista Augusto De la Torre, tiene un plazo de cuatro meses para presentar una propuesta de reforma y cuenta con el respaldo técnico de instituciones internacionales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco Mundial (BM) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Los sindicatos y organizaciones de la sociedad civil temen que la reforma incluya la privatización de los servicios públicos de salud, así como el desarrollo de fondos privados de pensiones.
Actualmente en Ecuador no existe ningún sistema privado de pensiones, por lo que todo trabajador cotiza al IESS, que se encarga de gestionar tanto la seguridad social como las pensiones a las personas jubiladas.
En ese sentido, el vicepresidente del FUT, José Villavicencio, consideró que la comisión ciudadana busca «aplicar la política neoliberal, incrementando años de aportes y reduciendo pensiones jubilares».
Villavicencio también exigió al Ejecutivo que salde de millonaria deuda histórica acumulada que tiene con el IESS.
A su vez, el presidente de la Confederación de Organizaciones Clasistas Unitarias de Trabajadores (Cedocut), Mesías Tatamuez, acusó al Gobierno de querer privatizar el IESS con la comisión ciudadana creada «a espaldas de los afiliados» y formada, según el sindicalista, por personas afines al Fondo Monetario Internacional (FMI).
«Con los del FMI no nos vamos a acercar. Nos vamos a acercar con el pueblo, con los afiliados, y nosotros vamos a crear nuestra propia comisión técnica para que defienda al Seguro y para que cobre al Gobierno», concluyó.
