México, 3 mar (EFE).- La Cámara de Diputados de México aprobó este miércoles, por unanimidad, el dictamen que reforma el artículo 90 de la Ley Federal del Trabajo, que establece que la fijación anual del salario mínimo no deberá realizarse por debajo de la inflación observada en el año previo.
En sesión semipresencial, el dictamen, avalado con 428 votos y remitido al Ejecutivo Federal para sus efectos constitucionales, tiene como objetivo mantener el poder adquisitivo del salario mínimo vigente.
En un comunicado, la Cámara indicó que el documento «refiere que el salario mínimo es un eslabón de gran importancia en la economía y debe cumplir con una función social consistente en elevar el ingreso de los trabajadores, así como satisfacer las necesidades más básicas de quien lo recibe».
Asimismo menciona que en los últimos años «muchos países han fortalecido los salarios mínimos con la finalidad de eliminar los excesivamente bajos y de proteger a los asalariados que se hallan en situación desfavorable y promover el trabajo decente».
El documento señaló que de acuerdo con la Constitución mexicana «los salarios mínimos generales deberán ser suficientes para satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural, y para proveer a la educación obligatoria de los hijos».
Actualmente, el salario mínimo en México es de 141,70 pesos (6,77 dólares), mientras que en la zona especial de la frontera norte es 213,39 pesos al día (10,19 dólares).
En la actual administración, del presidente Andrés Manuel López Obrador, el salario se ha incrementado en tres ocasiones 16 %, 20 % y 15 %.
El presidente de la Comisión del Trabajo y Previsión Social, el diputado Manuel de Jesús Baldenebro, del Partido Encuentro Social, consideró «importante y fundamental tener un salario competitivo, fuerte, digno y suficiente, y que nunca esté por debajo de la inflación observada durante el periodo de su vigencia».
Esto, dijo, para que los trabajadores puedan consumir más y proveer de lo necesario a su familia, fortaleciendo la dinámica y el crecimiento económico del país.
Recordó que el salario mínimo de los trabajadores mexicanos «difícilmente les alcanza para acceder a otros derechos y servicios y es un ingreso que ha estado por debajo del nivel inflacionario desde 1980, lo cual ha impactado directamente en los precios de la canasta básica y reconocemos la perspectiva de género que contiene la reforma que se propone».