Río de Janeiro, 6 ene (EFE).- El ahorro de los brasileños, tras haber alcanzado en 2020 una captación récord por las incertidumbres generadas por la pandemia, registró en 2021 su primer saldo negativo en los últimos cinco años, al parecer por la necesidad de compensar la pérdida de la renta, informó este jueves el Banco Central.
El valor retirado por los brasileños de sus cuentas de ahorros el año pasado superó en 35.497 millones de reales (unos 6.337,5 millones de dólares) el depositado en las mismas cuentas, de acuerdo con los datos divulgados por el organismo emisor.
Se trata del primer resultado anual negativo desde 2016, cuando los retiros superaron los depósitos en las cuentas de ahorros en 40.700 millones de reales (unos 7.267,9 millones de dólares).
El valor líquido retirado en 2021 de la aplicación financiera más popular y segura de Brasil (pese a ser la menos rentable) es el tercero mayor en un año desde que el indicador comenzó a ser medido en 1995, según el Banco Central.
El saldo líquido negativo de 2021 tan sólo es superado por los de 2015 y 2016, años en que el país sufrió la mayor retracción económica de su historia y los brasileños tuvieron que gastar sus ahorros por la falta de renta.
En total, los brasileños depositaron el año pasado 3,410 billones de reales (unos 608.928,6 millones de dólares) en sus cuentas de ahorros, de las que retiraron 3,445 billones de reales (unos 615.178,6 millones de dólares).
El resultado negativo del año pasado se produjo luego de que los brasileños inyectaran en 2020 un récord de 166.300 millones de reales (unos 29.696,4 millones de dólares) en sus cuentas de ahorros.
Ese crecimiento obedeció a que la población consiguió guardar parte de los subsidios distribuidos por el Gobierno en 2020 para paliar la crisis generada por la covid-19, que igualmente redujo el consumo ante las medidas de distanciamiento social, ante por la incertidumbre de lo que ocurriría en el futuro.
La captación de ahorro tuvo dos récords seguidos en abril y mayo de 2020, cuando el Gobierno ya estaba distribuyendo sus subsidios y la población estaba confinada en sus residencias y gran parte de los comercios cerrados.
Pero en 2021 el Gobierno redujo a casi una tercera parte el valor de los subsidios y el ahorro tan sólo consiguió registrar saldos positivos en cinco meses, entre abril y julio (además de diciembre), por lo que las retiradas terminaron superando significativamente los depósitos.
Entre enero y marzo de 2021 los brasileños retiraron 27.542 millones de reales (unos 4.918,2 millones de dólares) de sus cuentas de ahorros para pagar los gastos típicos de la época, como matrículas y material escolar, impuesto predial e impuestos sobre vehículos, en un trimestre en que el Gobierno suspendió la distribución de subsidios.
El aumento de los retiros de las cuentas de ahorros en 2021 también coincidió con la retomada de la economía brasileña, que incentivó nuevamente el consumo, y con la subida de la inflación a uno de sus mayores niveles en varios años.