Santiago de Chile, 30 oct (EFE).- La pandemia del coronavirus llevó al desempleo en Chile en el trimestre móvil julio-septiembre hasta el 12,3 %, cuando el país empezó a abrir su economía tras el parón del confinamiento, informó este viernes el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
La tasa de desocupación nacional, que se incrementó así un 5 % con respecto al mismo periodo de 2019, se encuentra casi medio punto porcentual por debajo de los que esperaban los mercados y registró su segundo retroceso mensual desde noviembre, tras su máximo histórico del 13,1 % alcanzado en julio y el 12,9 % de agosto.
El ministro de Economía, Lucas Palacios, calificó el dato de «buenas noticias» y dijo que «la gradual reapertura, aplicación de protocolos sanitarios y recuperación de la economía está siendo acompañada por mejores oportunidades de empleo para las familias».
«Sabemos que todavía nos queda un largo camino por delante y que muchas personas aún no han salido a buscar trabajo (…) Todavía hay más 1,6 millones de empleos por recuperar y los sectores más afectados son comercio, construcción, alojamiento y servicios de comida», agregó en su cuenta de Twitter.
El resultado de septiembre, mes en el que la mayoría de los barrios de Santiago de Chile estaban ya desconfinados tras una megacuarentena de meses, fue producto de las reducciones de la fuerza de trabajo en 13,5 % y de los ocupados en 18,2 %.
Los ocupados ausentes, personas que mantienen su contrato laboral y reciben parte de su sueldo gracias a una ley especial y pese al cese de actividades por la pandemia, representan el 15 % del total de ocupados y crecieron 69,7 %, lo que equivale a 455.078 personas.
Los desocupados, por su parte aumentaron un 45,6 %, incididos únicamente por los cesantes (54,4 %) y la tasa de ocupación informal alcanzó el 23,5 %, agregó el INE.
La pandemia provocó una caída del PIB chileno en el segundo trimestre de un 14,1 %, la mayor desde 1986, y el Banco Central estima una recesión de hasta un 5,5 % este año.
Mientras la emergencia sanitaria cede en Santiago, preocupan los rebrotes en el norte y sur del país, donde algunas ciudades siguen confinadas.
Con más de medio millón de infectados y 14.118 muertos desde el inicio de la pandemia en marzo, Chile es el duodécimo país del mundo con más contagios totales, según la Universidad Johns Hopkins, y aún mantiene las fronteras cerradas.