Ciudad de Panamá, 7 nov (EFE).- El Gobierno de Panamá aprobó en una mesa de diálogo con representantes del sector de transporte de pasajeros un subsidio temporal al combustible y así revisar ciertos incentivos para abaratar el costo de llantas y aceite de motor, entre otros, con lo que evitó una huelga anunciada para este lunes.
«Ya el paro fue suspendido porque hemos llegado a estos acuerdos que en buena fe se consiguieron», declaró a los periodistas el presidente de la Cámara Nacional de Transporte (Canatra), Abel Ovando.
El «paro nacional» de transporte había sido convocado por Canatra y otros gremios del transporte público debido al alza de los precios de los combustibles, que hace inviable el negocio porque las tarifas permanecen igual desde hace más de una década, según argumentaron.
La aprobación de una «renta sustitutiva» para el sector del transporte público de pasajeros permite entonces que no se suba el pasaje a los usuarios, «que era lo que estábamos buscando», dijo el dirigente gremial.
El viceministro de Comercio, Omar Montilla, dijo por su parte que el subsidio saldrá del presupuesto de Mi Bus, el sistema público de transporte complementario del Metro, y que tendrá vigencia «hasta el 31 de diciembre, un sacrificio que el Gobierno va a hacer, para que ellos (los chóferes) puedan tener una rebaja en el precio del combustible».
Según informes de la prensa local, el monto total del subsidio hasta diciembre próximo asciende a 3 millones de dólares.
El costo de los combustibles se ajusta cada dos semanas en Panamá, un importador neto, y desde hace un tiempo solo ha subido, cotizando ahora en 0,99 dólares el precio de la gasolina de 95 octanos; en 0,97 dólares la de 91 octanos y 0,87 el diésel en las provincias de Panamá y Colón. En el resto del país los precios son más altos.
El pasado 27 de octubre el servicio del transporte público fue paralizado en 5 de las 10 provincias de Panamá, sin que fuera afectada la capital, en protesta por el alza del combustible que incluyó el cierre de algunas vías, lo que dejó varados a miles de usuarios y produjo fuertes atascos de tráfico en el interior del país.
