São Paulo, 7 ago (EFE).- El ministro de Agricultura de Brasil, Carlos Fávaro, afirmó este lunes que las exigencias ambientales de la Unión Europea para el acuerdo comercial con el Mercosur son una «exageración» y apostó por la apertura de otros mercados si el bloque persiste en sus demandas.
Fávaro, exsenador y productor agrícola, aseguró en una rueda de prensa en São Paulo que Brasil está «abierto a la negociación», pero rechazó el intento de la UE de introducir en el tratado que está siendo discutido la posibilidad de sancionar productos que provengan de áreas deforestadas.
El ministro consideró estos intentos una “afrenta” a las reglas de la Organización Mundial del Comercio y reivindicó el “discurso altivo” del presidente Luiz Inácio Lula da Silva en sus conversaciones con los líderes europeos.
“Si la exageración de la UE permanece, estamos trabajando en nuevas aperturas (de mercados) en un nuevo escenario mundial”, declaró Fávaro, en referencia a los BRICS, el grupo de economías emergentes del que Brasil forma parte junto a Rusia, India, China y Sudáfrica.
El ministro destacó que Brasil ya tiene un código forestal “altamente restrictivo” que obliga a los agricultores de la Amazonía a dejar intocada el 80 % de la vegetación en sus terrenos.
Fávaro dijo que Brasil “dio gratis” el código forestal “en detrimento” de los agricultores brasileños de la región y a favor del “bienestar de aquellos que están en Europa”.
“El acuerdo no tiene ni una palabra sobre inclusión social, solo tiene obligaciones ambientales”, criticó.
Por otro lado, reconoció que el país suramericano, uno de los mayores productores agrícolas del mundo, aún puede “avanzar” en la trazabilidad de sus cosechas para garantizar su origen lícito.
Brasil, que detenta la Presidencia pro tempore del Mercosur, es el encargado de proponer a los otros miembros del bloque una respuesta a las nuevas exigencias ambientales que todavía tiene que ser enviada a la Unión Europea.
Pese a las diferencias, tanto los Gobiernos del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) como la Comisión Europea han dicho confiar en firmar el acuerdo comercial antes de terminar el año.