Buenos Aires, 18 mar (EFE).- El presidente argentino, Alberto Fernández, dijo este viernes que convocará a una “mesa de acuerdo” que le permita a su Gobierno diseñar la lucha contra la inflación, que en Argentina se ha acelerado por encima del 52 % lo que según el mandatario es un problema histórico que la guerra en Ucrania “agrava”.
“Convocaré desde este lunes a los representantes de los sectores productivos, empresarios, trabajadores formales y de la economía popular, representantes del campo y el comercio, la pequeña y mediana empresa y la sociedad civil a una mesa de acuerdo que nos permita diseñar un mañana en la lucha contra la inflación”, dijo Fernández en un discurso gravado.
“Confiamos en encontrar acuerdos que ayuden a bajar la inflación y a garantizar el aumento del poder adquisitivo de los salarios», agregó el mandatario, quien también señaló que su Gobierno no va a «dejar de controlar y fiscalizar precios».
Se esperaba que Fernández anunciara este viernes una batería de medidas en el marco de la “guerra contra la inflación” que había prometido entablar desde hoy en declaraciones realizadas el martes pasado, horas antes de que se conociera la aceleración de la suba de precios de febrero.
Los precios al consumidor en Argentina se aceleraron en febrero último al 52,3 % interanual y al 4,7 % mensual, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Fernández –quien calificó la inflación en Argentina como “casi una maldición” y recordó que lleva diez años consecutivos con ínidices de dos dígitos- no ha realizado anuncios este viernes, sino que dijo que serán sus ministros los que informarán diariamente sobre las medidas que se irán implementando.
FMI
Las medidas se esperaban luego de que este jueves el Congreso argentino aprobara el acuerdo negociado entre el Gobierno de Alberto Fernández y el Fondo Monetario Internacional (FMI) para refinanciar deudas por unos 45.000 millones de dólares, que entrará en vigor cuando tenga el aval del directorio del organismo.
El entendimiento procura reducir la inflación en un rango de 38%-48% para fines de 2022, aunque esa proyección dista de los pronósticos de 55 % para este año de los consultores privados que recaba mensualmente el Banco Central argentino.
“El acuerdo con el FMI nos permite comenzar a ordenar las variables macroeconómicas centrales en la lucha contra la inflación que es, como lo decimos siempre, un fenómeno multicausal”, dijo Fernández este viernes.
Pero el mandatario indicó que se necesitará “también fortalecer las expectativas”: “Esto solo lo conseguiremos si somos capaces de sentarnos en torno a una misma mesa, construyendo los entendimientos necesarios para construir el futuro”.
FONDO DE ESTABILIZACION
Fernández dijo que la guerra en Ucrania “agrava” el problema de la inflación en Argentina y se refirió al aumento del precio del trigo que impacta en el precio del pan, los fideos, la harina para consumo interno.
El mandatario anunció este viernes que va a “constituir un fondo de estabilización (del trigo) con el objetivo de evitar el traslado de esta suba del precio internacional al precio que pagan los argentinos”.
La inflación de febrero se vio impulsada por una fuerte subida en los precios de alimentos y bebidas: 7,5 % mensual y 55,8 % en términos interanuales, empujando el coste de la cesta alimentaria y, por ende, impactando negativamente en los índices de pobreza e indigencia, ya muy altos en Argentina.
