Buenos Aires, 26 oct (EFE).- El presidente de Argentina, Alberto Fernández, dijo que no va a ceder a las presiones de «algunos poderosos» para impulsar una devaluación del peso, afirmando que «ésa no es la solución» para «conseguir dólares», sino que se trata de una «máquina de generar pobreza», en un contexto en el que la brecha entre el tipo de cambio oficial y el paralelo es de un 139 %.
«Devaluar es muy fácil pero devaluar es una máquina de generar pobreza», afirmó Fernández en un acto de entrega de viviendas en el municipio bonaerense de Ezeiza.
«Muchos quieren desviarnos y quieren hacernos creer que tenemos que atender otros problemas, que son los problemas de pequeñas minorías que siempre se han hecho cargo de la Argentina. Y esas minorías quieren que uno les responda a sus intereses y se olvide de lo que todos estos argentinos están necesitando», afirmó.
CONSEGUIR DÓLARES
El presidente apostó por una Argentina «que crezca, que se desarrolle, que dé trabajo, que produzca y exporte».
«Así queremos conseguir los dólares. No por poner el dólar al precio que algunos poderosos necesitan. No es ésa la solución. Vamos a seguir trabajando, y si quieren dar pelea, daremos pelea», agregó.
No es la primera vez que el mandatario y su ministro de Economía, Martín Guzmán, niegan que el Gobierno vaya a decidir devaluar la moneda.
Pese a haber reestructurado su deuda externa con éxito y haber tomado una serie de medidas cambiarias e impositivas, las autoridades no logran doblegar las expectativas de devaluación.
«No llegamos al Gobierno para cruzar los brazos ni para obedecerles, sino para obedecer a los que nos votaron y para hacer una Argentina que a todos nos incluya», reafirmó el mandatario.
El dólar mayorista cotizaba a 78,25 pesos, pero el dólar «blue» o informal se obtenía a 187, después de haber alcanzado el récord de 195 el viernes pasado.
CRÍTICAS AL GOBIERNO ANTERIOR
El presidente encabezó un acto de entrega de viviendas sociales para las provincias Buenos Aires y Río Negro y anunció obras de reactivación de viviendas para las provincias de Formosa y La Rioja.
«Si alguno quiere saber lo que le pasa a la Argentina que devalúa, vuelvan a escuchar a Gildo (Insfran, gobernador de Formosa), y vuelvan a escuchar lo que pasó cuando llevaron el dólar de 9 a casi 15 (pesos). ¿Qué le pasó a la Argentina? Paralizaron esas obras que por el Plan Reconstruir estamos poniendo en marcha en Formosa», señaló.
Insfrán había afirmado que por la devaluación que se produjo en el Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019), unas 1.300 viviendas que ya tenían adjudicada la ejecución, pero hubo que volver a licitar su construcción. «Eso llevó un tiempo, hicimos todo el trabajo, y de esas 1.310 viviendas, nos dieron la mitad, que no se construyeron», afirmó.
El mandatario estuvo acompañado por el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof; la ministra de Desarrollo Territorial y Hábitat, María Eugenia Bielsa; la directora ejecutiva de Anses, Fernanda Raverta; y el intendente de Ezeiza, Alejandro Granados.
Desde allí se puso en contacto de forma virtual con los gobernadores de Río Negro, Arabela Carreras; La Rioja, Ricardo Quintela; y Formosa, Insfrán; y el intendente de Florencio Varela, Andrés Watson.