Lima, 26 ene (EFE).- El presidente de la empresa estatal peruana Perupetro, Daniel Salaverry, renunció este miércoles «de manera irrevocable», tan solo 17 días después de haber sido designado para ocupar ese cargo por el presidente de Perú, Pedro Castillo.
Salaverry envió un oficio a Castillo para informarle que dimitía para, según señalo en Twitter, evitar que su nombramiento sea utilizado por los adversarios del Gobierno para seguir «generando inestabilidad política al país por sus oscuros intereses».
Castillo nombró el pasado 9 de enero a Salaverry, un político de centro derecha que fue uno de sus rivales en las últimas elecciones presidenciales, como nuevo presidente de la empresa estatal encargada de negociar, firmar y supervisar las concesiones de los yacimientos de petróleo y gas.
Sin embargo, esa designación fue cuestionada por la oposición política y medios locales por su falta de experiencia en temas energéticos, como marca la normativa para designar a los miembros del consejo directivo de Perúpetro.
Incluso, la Contraloría de la República señaló que el también excongresista no contaba con los requisitos para ocupar el cargo y que el informe legal para su nombramiento había sido emitido dos días después de su designación formal.
Salaverry consideró este miércoles que ese informe no es vinculante y dijo que su designación se hizo de acuerdo a ley y con los mismos criterios que se utilizaron en otros gobiernos para nombrar a altos funcionarios.
El ahora exfuncionario, cuya candidatura presidencial por el partido centrista Somos Perú obtuvo apenas el 1,6 % de los votos en primera vuelta, tuvo un acercamiento con Castillo después de que en la segunda vuelta, del 6 de junio pasado, el izquierdista ganó los comicios por un ajustado margen a la derechista Keiko Fujimori.
A pesar de que se especulaba que podía ser ministro en el primer gabinete del mandatario, se distanció de Castillo cuando este conformó un primer Gobierno de corte izquierdista radical, pero retomó el acercamiento una vez que el gobernante colocó a ministros de izquierda moderada y centristas.
