San Juan, 29 abr (EFE).- El primer ministro de Dominica, Roosevelt Skerrit, defendió este viernes la decisión de los países de la Comunidad del Caribe (Caricom) de pedir el fin del embargo económico y comercial de Estados Unidos contra Cuba.
Skerrit, en el regreso a su país tras un viaje oficial a Cuba, donde recibió la Orden de José Martí, la más alta condecoración que otorga el Gobierno de La Habana, dijo en conferencia de prensa que los líderes del Caricom tenían previsto reunirse con la vicepresidenta de EE.UU., Kamala Harris, para expricarle esa postura.
«Este año se cumplirán 50 desde el inicio de las relaciones entre Caricom y Cuba, cuando los pioneros, Barbados, Jamaica, Trinidad y Tobago y Guyana, desafiaron el orden internacional de la época y establecieron relaciones con La Habana», recordó.
«No es una posición ‘antiestadounidense’, se trata de una cuestión de justicia y equidad. Eso es todo», aclaró Skerrit.
Dijo que las Naciones Unidas han pedido de forma reiterada durante la última década que se elimine el embargo, con solo Washington e Israel votando a favor de su mantenimiento.
«Si se hiciera una encuesta entre los Estados Unidos se encontrará que la mayoría de los ciudadanos dicen que este embargo debe ser eliminado. Entonces se trata de un tema de injusticia y la necesidad de que el pueblo cubano tenga la oportunidad de ser parte del sistema mundial», sostuvo Skerrit.
El primer ministro de Dominica indicó que, a pesar del embargo, Cuba ha podido lograr hitos significativos en áreas como salud, ciencia y asistencia en casos de desastre a los países de la región.
«Aquí, en el Caribe, si se eliminaran los médicos cubanos del sistema de salud de todos los países del Caricom, estos colapsarían», alertó.
El embargo de los Estados Unidos contra Cuba impide que las empresas estadounidenses y las compañías organizadas bajo las leyes de ese país o de propiedad mayoritaria de ciudadanos del territorio norteamericano realicen transacciones comerciales con intereses cubanos.
Skerrit se reunió durante su visita oficial de dos días a Cuba con el presidente, Miguel Díaz-Canel, con el fin de estrechar los ya sólidos lazos bilaterales.
