Ciudad de Panamá, 1 oct (EFE).- El principal aeropuerto de Panamá, Tocumen, un importante centro de conexiones regional, negó este viernes que adeude montos a la Constructora Norberto Odebrecht (CNO) por el proyecto de ampliación de la terminal, con costo de 900 millones de dólares y cuyo contrato rescindió por «incumplimiento».
«Tocumen no mantiene deuda con el contratista CNO S.A. A la fecha se ha pagado la suma de 910.767.792,38 dólares de los 917 millones de dólares del contrato. Es decir, CNO S.A. ha recibido 99,2 % del monto total del contrato», indicó la administración de la terminal.
En un comunicado, el Aeropuerto Internacional de Tocumen S.A. (Aitsa) agregó que «no tiene ninguna cuenta pendiente de pago que correspondan a avances de obra», y que hay «una porción de retenidos que contractualmente se reservan por ley hasta el final de la obra para garantizar al Estado el cumplimiento cabal de todas las obligaciones».
«Cabe resaltar que la devolución del 100 % de los montos retenidos se realiza posterior al Acta de Recepción Final de la Obra, firmada por las Partes y la Contraloría General de la República, según establece la Ley 22 de 2006», añadió.
El martes pasado, el Aitsa informó que se había «rescindido el contrato» a CNO «por incumplimiento», y que, por efectos de esa resolución, la empresa quedaba inhabilitada en Panamá «en cumplimiento de la Ley 22 de 2006, que regula la contratación pública».
La constructora brasileña, epicentro de un gran escándalo continental, respondió en un comunicado que no había incumplido el contrato, que la nueva Terminal 2 (T2) presentaba «un avance del 99,9 % y está operando», y que el «Aitsa mantiene un retraso en los pagos debidos a CNO, impactando de forma directa la ejecución de la obra».
Tocumen dijo este viernes que las obras del programa de expansión «reflejan un avance del 99 % desde febrero de 2020 y no registra avances significativos desde entonces a pesar de las adendas» suscritas con la empresa.
«Resulta imposible confiar considerando el historial reiterativo de incumplimientos a sus obligaciones. El contratista ha recibido suficientes oportunidades y tres adendas para concluir las obras a satisfacción, sin éxito a la fecha», indicó Aitsa en su comunicado.
La nueva T2 de Tocumen, un edificio de 116.000 metros cuadrados que amplía la capacidad de admisión de pasajeros del aeropuerto de 12 a 25 millones anuales, se comenzó a construir en 2013 y debía estar lista a finales de 2017, pero su entrega se ha ido postergando con la firma de adendas pactadas por el contratista y el Estado.
Odebrecht se adjudicó la obra en una licitación en el 2012 en la que ofreció el precio más bajo, 679 millones de dólares, pero la obra ya superó los 900 millones de dólares, de acuerdo con la información oficial.
Odebrecht protagonizó el escándalo de corrupción más grande del continente y admitió ante las autoridades de EE.UU. haber pagado millones en sobornos en una docena de países, casi todos en Latinoamérica, por lo que se le impuso una multa de 2.600 millones de dólares.
En Panamá, la empresa y la Fiscalía firmaron en julio de 2017 un acuerdo mediante el cual la compañía se comprometió a pagar en un plazo de 12 años una multa de 220 millones de dólares al Estado.
Este 2021 la Fiscalía pidió llamar a juicio a 50 personas por el caso Odebrecht, entre ellos los expresidentes Ricardo Martinelli (2009-2014) y Juan Carlos Varela (2014-2019).