Caracas, 1 dic (EFE).- El Sistema Económico Latinoamericano y del Caribe (SELA) busca reestructurar su mecanismo de acción con el fin de adecuarlo a las necesidades de los 25 países que integran el organismo y dar respuesta a «los temas urgentes que enfrenta la región», informó este miércoles la organización.
Según un comunicado difundido por el sistema de integración, comienza una «nueva etapa» que cuenta con el «apoyo» de todos los Estados miembros, en la que se prevé ejecutar el Programa de Trabajo 2022-2026, un acuerdo alcanzado durante la Reunión Ordinaria del XLVII Consejo Latinoamericano del SELA.
El secretario permanente del organismo, Clarems Endara, señaló que la aprobación del Proyecto de Reestructuración, ligado al Programa de Trabajo 2022-2026, es «una necesidad apremiante, debido a la crisis ahondada por la pandemia» por covid-19.
Endara recordó que la anterior reestructuración se efectuó en abril de 2003, pero «la realidad es otra 18 años después, las prioridades y los retos de los organismos internacionales deben ser adecuados a las necesidades de los países que los conforman, a su capacidad técnica y financiera».
En opinión del funcionario, la adecuación es necesaria para «lograr consolidarse como un aporte real y tangible en las tareas y principios encomendados por el Convenio Constitutivo».
Aclaró que, con los cambios propuestos, se aspira a que los Programas de Trabajo sean concebidos con una «agenda acotada, orientada a la obtención de resultados medibles, útiles y concretos, con el propósito de atender sin dilaciones las necesidades de los Estados miembros».
«Se ha instrumentado una agenda plurianual que fortalezca las capacidades de los países latinoamericanos y caribeños, permita la superación de la crisis económica y social ocasionada por la covid-19, fortalezca la resiliencia y se focalice en temas que generen opciones institucionales novedosas para mejores políticas públicas y buenas prácticas», precisó Endara.
La Secretaría Permanente activó un mecanismo de consulta, a través de una encuesta a los Estados miembros, y llevó a cabo reuniones de trabajo, «con el fin de lograr mayor precisión en su accionar».
Los ejes definidos para este ejercicio, según Endara, son la recuperación económica, la digitalización y el desarrollo social.
El secretario permanente ratificó el compromiso para que el SELA «retorne a los sitiales más altos de cualificación y excelencia, pero sobre todo de los pueblos que reclaman mayor atención de instancias internacionales que no son más que la extensión de sus más altos intereses, representados en los deseos de una mayor y mejor integración».