Ciudad de México, 17 ene (EFE).- La subestación eléctrica Metro-Energía, la más grande del país y que alimentará las líneas 1, 2 y 3 del subterráneo de la Ciudad de México, inició sus pruebas este martes con una inversión de 4.500 millones de pesos (225 millones de dólares) en medio de cuestionamientos al sistema de transporte.
La infraestructura, anunció en su presentación la jefa de Gobierno de la capital, Claudia Sheinbaum, ha permitido reemplazar antiguos transformadores, que empleaban un sistema de alimentación anticuado, así como la instalación de la subestación eléctrica de alta tensión (SEAT).
«Representa la estabilidad, la mejora, y 50 años más de suministro de energía eléctrica para las líneas 1, 2 y 3, las más antiguas del sistema», afirmó.
El estreno de la instalación ocurre en medio de las diversas polémicas que el metro de la capital ha protagonizado recientemente, como el choque de dos convoyes el 7 de enero que se saldó con la muerte de una joven de 18 años y más de un centenar de heridos, la separación de dos vagones o múltiples suspensiones de servicio.
Para solucionar lo que consideró «hechos atípicos», Sheinbaum solicitó el despliegue de 6.000 efectivos de la militarizada Guardia Nacional, que desde el pasado sábado patrullan en estaciones y vagones.
La mandataria apuntó a que los sucesos ocurridos en este comienzo de año podrían responder a actos de sabotaje, y no a falta de mantenimiento.
Por ello, este martes presumió de la inversión millonaria realizada para la subestación eléctrica.
«Es un hecho importante de difundir, porque saben que recientemente se ha dicho que el Gobierno de la ciudad no ha invertido nada en el metro. Entre otras acciones, hemos invertido en esta obra fundamental para darle larga vida», remarcó.
Señaló que se realizó «para dar confiabilidad al metro» y que la gente «sepa que se está trabajando todos los días» para mejorar este servicio de transporte, que emplean cerca de 5 millones de personas a diario.
También recordó las obras en la línea 1 del metro, cortada parcialmente desde hace meses, e indicó que invirtieron 37.000 millones de pesos (1.850 millones de dólares).
«Son dos grandes obras, pero el metro necesita más recursos y no vamos a escatimar en ello», dijo.
Además, destacó que la instalación la realizaron dos empresas públicas, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y el Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro.
Con esta nueva instalación, aseguraron la autoridades del metro, se modernizará el sistema de suministro de electricidad para tres líneas del subterráneo, que tendría capacidad para abastecer a ciudades como Villahermosa, Jalapa (ambas en el estado de Tabasco) o Celaya (Guanajuato).