Bogotá, 10 dic (EFE).- La alianza Zebra, que agrupa a 97 ciudades del mundo y promueve acciones para combatir el cambio climático, presentó este jueves una iniciativa para aumentar el uso de autobuses eléctricos en Brasil, Chile, Colombia y México.
De la iniciativa hacen parte 17 inversionistas y fabricantes que esperan poner en el mercado en los próximos 12 meses 32 modelos de autobuses que se adaptan a las condiciones de urbes como Ciudad de México, Sao Paulo, Santiago de Chile, Bogotá o Medellín.
Zebra, acrónimo de «Zero Emission Bus Rapid-deployment Accelerator», es un programa liderado por la red C40 de grandes ciudades decididas a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y el Consejo Internacional de Transporte Limpio.
Para hacer realidad el cambio de los modelos actuales, que operan con combustibles fósiles, se logró que inversionistas de diferentes partes del mundo reunieran mil millones de dólares que permitirán poner más de 3.000 autobuses eléctricos en las calles de América Latina.
El gerente del programa Zebra, Thomas Maltese, destacó en una conferencia de prensa virtual que entre las bondades del cambio está que los autobuses de cero emisiones mejoran la calidad del aire, generan nuevos puestos de trabajo y también permiten ahorros financieros para los operadores y los municipios.
MENOS GASES DE EFECTO INVERNADERO
Según cifras del programa Zebra, el transporte es responsable de un gran porcentaje de las emisiones de gases de efecto invernadero y esto se debe en gran medida a la obsoleta tecnología en autobuses que funcionan con diésel.
«Hay ciudades que ya están decididas a hacer que sus flotas de transporte público tengan cero emisiones», destacó Maltese quien también valoró positivamente la iniciativa porque los compromisos ayudarán a cumplir las demandas de las autoridades y operadores de tránsito.
También se logrará superar dos de las principales barreras para la incorporación de flotas de autobuses de cero emisiones que tienen que ver con la limitada oferta para la elección de vehículos y la falta de inversión.
«La alianza garantizará que la región tenga ciudades más limpias y saludables, creará empleos nuevos sostenibles y acelerará soluciones equitativas a la crisis climática», aseguró el ejecutivo.
El director del C-40 para Latinoamérica, Manuel Olivera, destacó que los autobuses eléctricos también pueden permitir mejores tarifas para el usuario.
En la actualidad, América Latina cuenta con más de 1.900 autobuses eléctricos que evitan la liberación de más de 218.000 toneladas de emisiones de CO2 a la atmósfera cada año.
Sin embargo, estos vehículos representan menos del 1% del total de la flota regional de autobuses, lo que hace evidente la urgencia de esta transición y la importancia de que los fabricantes e inversionistas se comprometan.
A largo plazo, los gastos de operación y mantenimiento de los autobuses eléctricos son mucho más bajos que los de los vehículos diésel, agregaron los representantes de Zebra.