Santiago de Chile, 18 mar (EFE).- Después del receso económico del 6 % en 2020, Chile logró afianzar su recuperación tras la pandemia de la covid-19 el año pasado con una cifra récord de crecimiento del producto interior bruto (PIB) del 11,7 %, el mejor dato en al menos 30 años, desde que existen registros.
Así lo informó este viernes el Banco Central, que confirmó una marca superior incluso a las proyectadas por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), que apuntaba un alza del 9,2 % y el Fondo Monetario Internacional, que estimaba un 11 %.
«Está claro que durante 2021 hubo una recuperación muy significativa de la actividad», celebró el ministro de Hacienda, Mario Marcel.
El año pasado Chile logró superar los niveles previos a la covid-19, agregó, y se sobrepuso también a las caídas registradas durante el estallido social, la mayor ola de protestas sociales en al menos tres décadas que comenzaron en octubre 2019.
ADAPTACIÓN A LA PANDEMIA
Entre junio y agosto 2021, Chile vivió una fuerte segunda ola de la covid-19, que obligó a detener parcialmente la actividad económica y a decretar cuarentenas que se extendieron durante casi tres meses en algunas regiones.
Pese a ello, «se produjo una apertura gradual y una mayor adaptación de los hogares y empresas al contexto sanitario» que desembocó en un mayor crecimiento del comercio y los servicios personales, explicó el Banco Central.
Se registraron alzas en todas las actividades económicas, a excepción de la minería, y destacaron especialmente fuertes incrementos en el área de restauración, hotelería, construcción y transporte.
La poderosa industria minera -que representa cerca de un 10 % del PIB y no ha cesado sus operaciones en toda la crisis sanitaria- registró una caída del 0,3 % en 2021, en gran medida por la baja que experimentó en el tercer trimestre (-5,2 %).
Con el 28 % de la producción mundial, Chile es el primer exportador mundial de cobre, un metal fundamental en la transmisión de energía que el pasado 7 de marzo alcanzó su precio máximo histórico, de 4,86 dólares la libra.
También tuvo un efecto negativo sobre el PIB el déficit comercial, que fue de 20.307 millones de dólares -correspondiente al 6,6 % del PIB-, debido un aumento en las importaciones del 31,3 % y una caída del 1,5 % en las exportaciones.
ALZA MODERADA EN CUATRO TRIMESTRE
Durante el cuarto trimestre, cuando la situación epidemiológica fue ideal -con tasas de positividad en torno al 2 % y menos de 1.000 contagios diarios-, el crecimiento fue del 1,8 % en comparación con los tres meses anteriores y del 12 % interanual.
«Este incremento es considerablemente más moderado que el del tercer trimestre (17,2 %) y el segundo trimestre (18,9 %). De hecho, en diciembre tuvimos una variación levemente negativa», señaló Marcel.
También se mantuvo esta tendencia en enero, cuando el país atravesaba una fuerte embestida de contagios por la variante ómicron, y la economía llegó a caer un 1 % pese a no haber impuesto nuevas cuarentenas y haber desplegado un exitoso proceso de vacunación que alcanza a más del 95 % con la pauta completa.
EL RETO DE LA INFLACIÓN
La fuerte recuperación económica «fue alimentada principalmente por el alza en el consumo, que a su vez se basó en las transferencias fiscales y los retiros de fondos de pensiones», aprobados para ayudar a las familias durante la crisis sanitaria, agregó Marcel.
Esto provocó una aceleración de la inflación, lamentó, que alcanzó el 7,2 % en 2021 -la más alta en 14 años- y que se ha convertido en uno de los principales retos económicos del nuevo gobierno, del izquierdista Gabriel Boric.
Desde el inicio de la pandemia, Chile aprobó más de 40.000 millones de dólares en ayudas sociales y permitió tres retiros anticipados del 10 % de las pensiones, lo que supuso casi 50.000 millones de dólares adicionales circulando.
La inflación está en la línea con el contexto mundial, según los expertos, pero llevó al Banco Central a subir la tasa de interés referencial del 4 % al 5,5 %, el movimiento más importante desde que existe la denominada tasa de política monetaria (TPM) nominal de 2001.
