São Paulo, 13 sep (EFE).- La petrolera estatal Petrobras presentó el pedido de licencia ambiental para desarrollar diez proyectos de energía eólica en alta mar, con los que planea convertirse en la mayor generadora de este tipo en Brasil, anunció este miércoles el presidente de la compañía, Jean Paul Prates.
«Tenemos tradición en operaciones marítimas y seremos también la empresa con mayor potencial de energía eólica en alta mar de Brasil», con diez áreas que suman un potencial de 23 gigavatios (GW) de generación, dijo Prates en una rueda de prensa durante un evento del sector.
De las diez áreas para las que se pidió la licencia ambiental para operar, siete están localizadas en el noreste del país -la región de mayor potencial-, dos en el sureste y una en el sur.
El monto de la inversión necesaria para poner en operación los proyectos no fue divulgada todavía.
«Esta fecha marca nuestra entrada efectiva en el segmento de energía eólica offshore. Estamos uniendo fuerza con las universidades brasileñas», como la Federal de Río de Janeiro (UFRJ) y la de São Paulo (USP), para desarrollar una tecnología eólica fluctuante propia, detalló Prates.
Las iniciativas contarán también con la cooperación del Centro de Estudios para el Desarrollo de Proyectos de Energía Eólica del Servicio Nacional de Aprendizaje Industrial (Senai) en Natal, la capital del estado de Río Grande do Norte (noreste).
Este centro está localizado en el estado líder en Brasil de la generación de energía eólica en tierra y ya cuenta con los mecanismos y herramientas de medición necesarios para establecer el potencial real de las áreas exploradas en alta mar.
«Vamos a generar energía para el mercado libre y para producir hidrógeno limpio», completó Prates en la entrevista concedida en el marco del congreso internacional Brazil Windpower.
El Instituto Brasileño de Medio Ambiente (Ibama) ha recibido hasta ahora 78 peticiones de licencia ambiental para el desarrollo de proyectos de energía eólica marina en Brasil que tienen un potencial sumado de 189 gigavatios, prácticamente la actual capacidad instalada de generación de Brasil (195 GW).
El desarrollo de tales proyectos, sin embargo, aún depende de que el Congreso apruebe el marco legal para el sector, lo que se espera que esté concluido hasta diciembre, según anticipó el martes el ministro de Minas y Energía, Alexandre Silveira, en la ceremonia inaugural del Brasil Windpower.
«El mar no es privado y no se trata de regular la energía sino de regular la titularidad del mar continental brasileño, con reglas claras sin dar la titularidad a alguien, solo una autorización o una concesión y el Estado decidirá», explicó Prates.
En la misma rueda de prensa, Prates y el presidente de la gigante brasileña de motores eléctricos WEG, Harry Schmelzer Jr, presentaron el proyecto de construcción del generador de energía eólica terrestre más grande de Brasil.
«Estamos retornando a la energía eólica de una forma efectiva y esto será muy importante para las inversiones del país y un paso muy importante para la nueva historia de los aerogeneradores», señaló Schmelzer Jr.
WEG comenzó en 2010 con la energía renovable y un año después adquirió tecnología de Estados Unidos para desarrollar aerogeneradores de 2,1 megavatios, lo que le ha permitido desarrollar sus propios modelos de 4,2 megavatios.
El aerogenerador que pretende desarrollar en asociación con Petrobras tendrá 220 metros de altura, 1.830 toneladas de peso y una potencia de 7 megavatios (MW).
Petrobras pretende invertir 130 millones de reales (unos 26 millones de dólares o 24,5 millones de euros) en su proyecto con WEG.