Buenos Aires, 8 jun (EFE).- La norteña provincia argentina de Chaco anunció este martes el lanzamiento de una oferta a acreedores privados para refinanciar bonos por 250 millones de dólares.
La propuesta, remitida este martes a la Bolsa de Buenos Aires, implica modificar los términos de una serie de títulos con vencimiento en 2024 y una tasa de interés anual del 9,375 %.
Entre otros cambios, se propone extender el vencimiento de los bonos a febrero de 2028 y bajar las tasas de interés, que serían inicialmente del 3,5 % anual para incrementarse progresivamente, hasta el 8,25 % anual desde 2024.
El plazo para que los acreedores den su consentimiento vencerá el próximo 23 de junio y Chaco necesita un nivel mínimo de adhesión del 75 % para concretar la reestructuración propuesta.
Chaco lanzó su oferta luego de que en abril pasado llegara a un principio de acuerdo con un grupo de acreedores que poseen en sus carteras el 50 % de los bonos a reestructurar.
El Ejecutivo provincial dijo que, de concretarse la reestructuración, Chaco tendrá un «alivio financiero significativo, en la forma de reducción de cupones y reperfilamiento de plazos».
Chaco es una de las doce provincias de Argentina que planteó el año pasado la necesidad de reestructurar sus deudas en moneda extranjera, tal como lo hizo el propio país suramericano en un contexto de recesión económica agudizada por la pandemia de la covid-19.
Ocho provincias ya lograron concretar reestructuraciones de títulos públicos por un total de 4.742,7 millones de dólares.
El mayor de estos procesos aún pendiente es el de la provincia de Buenos Aires, que en abril de 2020 lanzó una oferta para canjear bonos de ley extranjera por 7.148 millones de dólares y aún no ha llegado a un acuerdo con sus acreedores.
Este lunes, luego de que la provincia de Buenos Aires volviera a extender el plazo de adhesión a su propuesta, uno de los grupos de acreedores de mayor peso, el Grupo Ad Hoc de Bonistas de Buenos Aires, dijo que el Ejecutivo bonaerense había rechazado una contraoferta elevada por el comité el pasado 4 de junio.
El comité afirmó en un comunicado que la propuesta que hizo a Buenos Aires fue la «más generosa presentada por los acreedores de cualquier provincia argentina en el ciclo de reestructuración actual».
Lamentó además que su oferta fuera rechazada en «el contexto de una rápida recuperación de la actividad económica y de los ingresos fiscales en Argentina, impulsada tanto por la normalización como por la extraordinaria mejora en los precios de las materias primas y los términos del intercambio».