Buenos Aires, 26 abr (EFE).- El Gobierno de la provincia de Buenos Aires, la más rica y poblada de Argentina, anunció este lunes una extensión hasta el próximo 7 de mayo del plazo para que acreedores privados adhieran a su oferta de canje de bonos de ley extranjera por 7.148 millones de dólares.
En el comunicado oficial informa que “a partir del pleno convencimiento de que es posible llegar a un acuerdo sostenible con los acreedores que aún no han aceptado la oferta”, invitará “a los principales tenedores a una última ronda de consultas”.
Esa ronda de consultas tendrá como “fin de identificar las mejoras finales a incorporar en una enmienda formal de la propuesta, la cual incorporará todas las mejoras posibles en el marco de la sostenibilidad de la deuda provincial y la sostenibilidad macroeconómica agregada”.
En tanto, la provincia hará pública, durante las próximas semanas, la enmienda a la propuesta original.
“La Provincia se mantiene optimista en que un entendimiento que conduzca a una reestructuración exitosa de la deuda es posible”, indica.
La provincia de Buenos Aires lanzó su oferta de canje el 24 de abril de 2020 y desde entonces ha prorrogado periódicamente el plazo de adhesión en medio de duras negociaciones con los acreedores, en tanto se encuentra en cese de pagos desde mayo último.
Hace un mes atrás, un grupo de fondos demandó a la provincia en los tribunales de Nueva York por el impago de 204,8 millones de dólares en intereses devengados por emisiones de deuda, criticando que las autoridades bonaerenses no hayan querido negociar «de buena fe».
La provincia “ha mantenido un diálogo constante con sus bonistas y los diversos asesores del comité que nuclea a varias de las instituciones con mayor número de tenencias de bonos provinciales bajo ley extranjera”, dice el comunicado de hoy.
En tanto, “ha buscado permanentemente maneras de llegar a un entendimiento con sus bonistas, siempre dentro de un marco de sostenibilidad de la deuda provincial”.
Señala que “al finalizar conversaciones restringidas, recientemente se hicieron públicos términos indicativos para una posible mejora en la propuesta inicial”, por lo que “continuó dialogando de buena fe e identificando posibles mejoras”.
Y que “el único motivo para no haber enmendado formalmente la invitación” es porque “todavía confía en un último esfuerzo para alcanzar un entendimiento con una mayoría de acreedores”.
Agrega que “permanece comprometida con una negociación de buena fe, y ha dado muestras de ello a lo largo de todo el proceso, a pesar de la actitud intransigente de algunos acreedores individuales”.
Buenos Aires es una de las doce provincias de Argentina que han planteado el año pasado la necesidad de reestructurar sus deudas en moneda extranjera, tal como lo hizo el propio país suramericano, en un contexto de recesión económica agudizada por la pandemia de covid-19.