Ciudad de México, 23 mar (EFE).- El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, acusó este jueves a los republicanos de Estados Unidos de financiar a grupos «seudoambientalistas» que se oponen a obras emblemáticas de su Gobierno, como el Tren Maya en el sureste del país.
El mandatario señaló en su rueda de prensa diaria «el doble discurso y la doble moral» de los republicanos porque «cómo hablan de la defensa del medioambiente y de los problemas del cambio climático y al mismo tiempo destruyen».
«Y cuando se trata de hacer una obra como el Tren Maya, ellos mismos están financiando a estos grupos para que obstaculicen cualquier obra que beneficie al pueblo”, sostuvo.
Sus declaraciones se producen después de que los republicanos denunciaron en el Senado estadounidense, durante una comparecencia del secretario de Estado, Antony Blinken, que Fuerzas Armadas mexicanas entraron a las instalaciones de la minera Calica, filial de la estadounidense Vulcan Materials, en el Caribe mexicano.
El Gobierno mexicano clausuró la minera el año pasado al acusarla de ocasionar un desastre ecológico en Quintana Roo, estado del sureste, y estar detrás de protestas contra el Tren Maya, la obra emblemática de López Obrador para la zona.
«Senadores republicanos (están) defendiendo a esta empresa estadounidense (Vulcan Materials) que se llevaba grava de Playa del Carmen, y de las costas del Caribe, de la zona natural y turística más bella de México y de las más bellas del mundo», criticó ahora el gobernante mexicano.
El conflicto con Vulcan Materials, que tiene una concesión hasta 2037, causa un roce comercial con Estados Unidos, donde Blinken reconoció el miércoles la «preocupación» de la Casa Blanca por el caso, y advirtió de un «impacto muy negativo en los esfuerzos de México para atraer futuras inversiones de los Estados Unidos».
Pero López Obrador insistió en que «utilizaban los terrenos como bancos para sacar grava y llevar ese material de construcción a Estados Unidos y usarlo en la construcción de carreteras. Todo esto por la complicidad que había con las autoridades”.
Por ello, aunque prometió acatar la resolución del panel de controversias, pidió que revise los daños causados por la minera, que además tiene un conflicto legal con la cementera mexicana Cemex.
«Sí me gustaría mucho que conocieran el territorio, que conocieran la destrucción, el ecocidio que causó esta empresa estadounidense, cómo devastaron zonas naturales de manglares, pero en una superficie amplia, y cómo inclusive afectaron zonas arqueológicas”, indicó.
Las declaraciones de López Obrador representan una escalada de su conflicto con los republicanos después de que senadores estadounidenses propusieran declarar la guerra a los cárteles mexicanos para usar a las Fuerzas Armadas para combatirlos. EFE
ppc/szg
(foto)(video)