Lima, 26 oct (EFE).- El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) de Perú anunció este miércoles que va a asignar 4.000 millones de soles (unos 1.000 millones de dólares) a la empresa estatal Petroperú para la compra de combustibles y evitar así un desabastecimiento de crudo en el país.
«La inyección de este aporte excepcional de capital a Petroperú permitirá evitar una crisis de desabastecimiento en el país. Estos recursos permitirán que, en adelante, no se generen problemas en la provisión de combustibles», indicó el viceministro de Economía, Alex Contreras, en una comunicación difundida por el ministerio en Twitter.
El MEF detalló que la petrolera estatal controla el 40 % del mercado de diésel y cerca del 50 % del mercado de gasolinas, «por lo que es un actor importante» y que cualquier alteración en su ciclo de producción o de abastecimiento «tiene impactos severos en la economía».
«Como establece la norma, este aporte de capital está condicionado a una serie de mejoras en Petroperú, como la presentación de un plan de reestructuración de la empresa que garantice su sostenibilidad a lo largo del tiempo».
Más tarde, el presidente de Petroperú, Humberto Campodónico, confirmó que esta inyección de capital se destinará directamente para la compra de combustible, y no para la refinería de Talara.
«Este fin de semana se debe regularizar el abastecimiento de gasolina diésel», dijo Campodónico en Canal N.
Explicó que forma parte de su mandato solucionar «esta crisis» de la empresa, pero dijo que, cuando la empresa calificadora Fitch volvió a rebajar la posición de Petroperú, en septiembre pasado, e indicó que había problemas de liquidez y una deuda excesiva, se motivaron «dificultades con los buques para direccionar desembarcos y garantizar el abastecimiento del mercado local».
Por su parte, Repsol, que abastece a la mitad del mercado peruano, emitió un comunicado en el que afirma que «el suministro de combustibles en la refinería La Pampilla está plenamente garantizado» y que esta «se encuentra produciendo en plena capacidad».
También anunció el buen funcionamiento de las estaciones de servicio Repsol y sus afiliadas, que están atendiendo de manera normal a los consumidores.
Aclara que las filas de camiones cisterna que se han formado este miércoles frente a la refinería de La Pampilla, pocos kilómetros al norte de Lima, «se deben a la creciente demanda que ha generado la falta de producto en otros operadores».