Ciudad de Panamá, 27 abr (EFE).- El Gobierno de Panamá alertó este miércoles que la suspensión temporal del impuesto al combustible, una medida que impulsa el Parlamento en medio de la pronunciada alza en los precios, «requiere una renta sustitutiva», pues supondría una pérdida de ingresos cercana a los 15 millones de dólares mensuales.
En la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) avanza un proyecto de ley que suspende por tres meses, prorrogables automáticamente, el cobro y recaudación del impuesto al consumo de combustibles y derivados del petróleo en Panamá, donde los elevados precios han provocado protestas y huelgas de transportistas en varias partes del país.
La iniciativa 808 ya ha sido aprobada en dos de los tres debates legislativos, y «establece una tabla numérica, donde se describe la renta sustitutiva para esta suspensión del cobro del tributo», informó la AN, de mayoría oficialista.
«Muy responsablemente la Asamblea encontró una renta sustitutiva», indicó un comunicado del Órgano Legislativo, sin dar más precisiones.
En ese contexto, el director general de Ingresos, Publio de Gracia, afirmó este miércoles que «el debate es importante, siempre pensando en los mejores intereses del país y de sus ciudadanos», y destacó que «una suspensión transitoria en el cobro y recaudación del impuesto de consumo al combustible y derivados del petróleo representaría una pérdida de aproximadamente 15 millones de dólares mensuales».
Al eliminar o suspender temporalmente el cobro y recaudación de cualquier impuesto «se debe buscar una renta sustitutiva, ya que el Presupuesto General del Estado 2022 se afectaría en obras, proyectos y obligaciones a las que se debe hacer frente», añadió el jefe de la Dirección General de Ingresos, un ente del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
Es por ello que, agregó de Gracia, «el Gobierno Nacional ha avanzado en una estrategia, con una mesa (de diálogo) con los transportistas, buscando una solución, y viendo de qué manera podemos tratar de garantizar que nos sigamos recuperando económicamente y que los hogares de los panameños y panameñas también», afirmó.
El Ejecutivo del presidente Laurentino Cortizo ha aprobado desde noviembre pasado subsidios por un total de 11 millones de dólares a los transportistas para abaratarles el costo del combustible e impedir con ello un alza del pasaje.
Sin embargo, esa medida ha sido vista como insuficiente por algunos choferes del transporte público que han realizado paros de labores, mientras crecen las denuncias de los usuarios sobre alzas ilegales en el costo del pasaje.
La gasolina y el diésel, por primera vez en casi una década, se venden por encima de un dólar por litro desde hace semanas en Panamá, un importador neto de hidrocarburos, una situación que se adjudica a la coyuntura internacional derivada de la invasión rusa a Ucrania.