Río de Janeiro, 28 oct (EFE).- La ciudad brasileña de Río de Janeiro aspira a organizar en 2023 la Web Summit y suceder a Lisboa como sede de una de las mayores citas tecnológicas del mundo y que reúne anualmente a cientos de «startups» (empresas emergentes) e inversores, anunciaron este jueves fuentes oficiales.
La candidatura carioca a anfitrión del evento será presentada la próxima semana en Lisboa, en la edición de la Web Summit de este año, por el propio alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, ante los organizadores de la considerada mayor conferencia mundial de tecnología, transformación digital, emprendimiento e innovación.
De acuerdo con la municipalidad, Río de Janeiro está disputando la sede de la cita con la también brasileña Porto Alegre y, de adjudicarse el derecho, será la primera ciudad de América Latina en organizarlo.
Paes visitará lunes y martes de la próxima semana la nueva edición de la Web Summit de Lisboa y se reunirá con los organizadores del evento y con los responsables por su montaje en la capital portuguesa.
Los días 15 y 16 de noviembre será el turno de los representantes de la organización de visitar Río de Janeiro para conocer la ciudad y la propuesta y discutir las condiciones financieras.
La Web Summit estará representada en Río por su vicepresidente global, Artur Pereira, y por el presidente de Connected Intelligence (empresa que administra la conferencia), Paddy Cosgrave.
Lisboa viene pagando 11 millones de euros anuales desde 2018 por el derecho a organizar la Web Summit y calcula que el impacto económico del evento le deja cerca de 300 millones de euros al año, principalmente para el sector hotelero y de restaurantes.
La primera edición de la conferencia se celebró en 2009 en Dublín para tan solo 400 personas, pero en 2016, cuando se anunció el acuerdo para fijarla en Lisboa, la cita ya tenía fama mundial y reunía a unos 60.000 participantes.
En diciembre de 2020, en su pasada edición, la conferencia fue realizada de forma totalmente virtual por la pandemia de la covid-19 y, en tres días, reunió a 100.000 participantes, incluyendo 800 conferenciantes de 150 países, 2.500 empresas emergentes, 1.250 inversores y 2.500 periodistas.
Entre los asistentes habituales a la cita destacan gigantes como Google, Amazon, Facebook, Wikipedia, Mozilla y Uber.