Brasilia, 8 sep (EFE).- Un estudio realizado por el área técnica del Ministerio de Economía de Brasil, divulgado este martes, sugiere al Gobierno de Jair Bolsonaro que vete una millonaria condonación de deudas tributarias que el Congreso aprobó en favor de las iglesias.
Esas deudas han sido calculadas en unos 1.000 millones de reales (cerca de 190 millones de dólares) y fueron acumuladas por iglesias de diversas religiones, aunque la mayor cantidad corresponde a las evangelistas, que son parte de la base política en que se apoya el Gobierno del líder de la ultraderecha.
El perdón de esas deudas fue incluido por presiones de líderes evangelistas en la Cámara de Diputados y el Senado, que integran un poderoso grupo suprapartidario, en una ley que establece la forma en que debe ser utilizado el dinero público en el combate a la pandemia de coronavirus.
Por imperativos constitucionales, el presidente Bolsonaro tiene plazo hasta el próximo viernes para sancionar o vetar, sea total o parcialmente, ese proyecto de ley y, de acuerdo a la Procuraduría de Hacienda, área técnica del Ministerio de Economía, debería eliminar del texto esa condonación de deudas.
En el documento publicado este martes, los técnicos de Economía sostienen que, si bien las iglesias están exentas de impuestos a sus actividades religiosas, las deudas corresponden a tributos de otra naturaleza, cuyo pago está contemplado en la legislación.
Ese estudio aún debe ser analizado por el ministro de Economía, Paulo Guedes, un ultraliberal pupilo de la Escuela de Chicago sin los vínculos políticos que Bolsonaro tiene con los evangelistas, que fueron una de sus grandes bases durante la campaña electoral de 2018 y se han consolidado como un importante sosten de su Gobierno.
En las últimas semanas, debido a la crisis económica generada por la pandemia de coronavirus, Guedes se ha enfrentado a otros sectores del Gobierno que presionaban por aumentar los gastos públicos en el proyecto de presupuesto de 2021, remitido al Parlamento hace diez días.
Uno de los alegatos de Guedes para contener aún más el gasto es que la parálisis de las actividades económicas causada por la crisis sanitaria ha derrumbado la recaudación fiscal, lo que generará este año un déficit histórico en el sector público que se proyectará aún en las cuentas del año próximo.
La discusión sobre el perdón de la deuda de las iglesias se da en momentos en que la economía brasileña ha vuelto a entrar en recesión técnica, después de que su Producto Interno Bruto (PIB) cayó un 9,7 % en el segundo trimestre de este año frente al primero.
También coincide con un momento de aproximación entre Bolsonaro y las fuerzas conservadoras que le respaldan en el Parlamento, de las que se había distanciado hace unos meses, presionado por grupos de la ultraderecha que pedían una «intervención militar» para «cerrar» las cámaras legislativas y la Corte Suprema.