Buenos Aires, 12 abr (EFE).- La filial argentina del gigante automovilístico japonés Toyota planea introducir a fines de este año en el país suramericano uno de los modelos de automóvil híbrido enchufable importado desde Japón, según explicaron este miércoles fuentes de la compañía.
Toyota comercializa en Argentina desde 2009 el auto híbrido Corolla importado desde Brasil, pero la marca japonesa planea sumar la nueva tecnología enchufable -de la que en Japón se producen más de 40 modelos- hacia fines de 2023, dijo a EFE el director de Asuntos Corporativos, Diego Prado.
El modelo de estos autos -que son silenciosos, tienen las mismas prestaciones que uno a combustión y una alta potencia- que será importando no fue confirmado, pero sí que el segmento que más crece es el vehículo utilitario deportivo (SUV).
En Argentina otras marcas ya comercializan el llamado híbrido «plug-in», que ahora introducirá Toyota y que tiene la característica de ser un híbrido -cuyo motor genera la electricidad que se carga en la batería además de usar combustible- que también puede enchufarse a un cargador domiciliario o en estaciones de servicio.
Las grandes automotrices multinacionales no producen en Argentina este tipo de autos, pero sí los importan y comercializan.
Toyota es la mejor posicionada, al vender 86 % de los vehículos con motorización alternativa en Argentina en 2022: 6.726 unidades, un nivel que prevé repetir en 2023 incorporando la tecnología híbrida enchufable.
El 8 % de sus ventas en Argentina es de autos híbridos, y el año pasado, el Corolla Cross y el Toyota Corolla fueron los dos modelos que reunieron el 79 % de las matriculaciones.
Toyota produce los autos de pasajeros en Brasil y utilitarios en Argentina, en una decisión estratégica basada en la unión aduanera Mercosur, a la que pertenecen los dos países junto a Paraguay y Uruguay.
En Argentina, la empresa planea producir este año 182 mil unidades en su planta de la localidad de Zárate, en la provincia de Buenos Aires, al haber contratado 8.600 empleados, con una integración del 40 % en autopartes argentinas, y desde donde exporta el 80 % a 22 países de América Latina (la mitad a Brasil).
Argentina restringe los pagos a las importaciones por su escasez de divisas, y la playa fiscal dentro de la planta está plagada de autos importados de los que no pueden disponer, pese a que la empresa tiene un saldo positivo en su balanza comercial.
El fabricante de Prius, el primer vehículo de pasajeros híbrido producido a gran escala, considera que las limitaciones para el crecimiento de esta tecnología es la producción global de litio, mineral con el que se hacen las baterías, el desarrollo de la red de carga y la infraestructura de los países.
En ese sentido, Toyota se asoció a la producción de litio en el norte argentino: Toyota Tsusho Corporation participa con un 25 % en Sales de Jujuy junto con la australiana Orocobre (66,5 %) y la empresa estatal provincial «Jujuy Energía y Minería Sociedad del Estado».
En Argentina, el «desafío es el desarrollo de la infraestructura de carga, sobre todo enchufable» y un «entorno macroeconómico previsible para realizar inversiones», dijo Prado, en tanto explicó que instalar una fábrica de baterías no requiere una inversión demasiado alta, pero Argentina necesita también garantizar las fuentes de energía.