La Paz, 14 may (EFE).- Las asociaciones de transporte pesado de Bolivia bloquean algunas zonas del país en rechazo a las pruebas piloto y la reactivación del funcionamiento de un ferrocarril de carga con Chile por considerarlo atentatorio contra sus fuentes de trabajo por lo que se declararon en paro indefinido.
La ciudad central de Cochabamba ha sido el centro de las medidas de presión de los transportistas de carga pesada, que este viernes obstruyeron la circulación de la principal carretera que vincula La Paz, en el occidente, con Santa Cruz, en el este.
También han habido protestas en Potosí, al sureste del país, pero que no han ocasionado el cierre permanente de vías, de acuerdo al informe del comandante departamental de la Policía de esa región, Juan Alarcón.
POSISICÓN DEL GOBIERNO
«No hay razón» y «no hay argumento alguno» para que continúen las protestas, dijo en una rueda de prensa el ministro de Obras Púbicas, Édgar Montaño, refiriéndose a un acuerdo firmado esta semana con ese sector en el que «de manera voluntaria, Ferroviaria Andina, ha suspendido toda prueba piloto» del ferrocarril entre Arica y La Paz.
Justamente las pruebas de funcionamiento del ferrocarril, que se restituyó luego de 16 años, concluyeron con la llegada el pasado sábado a suelo boliviano de 442 toneladas de bobinas de acero, a la fronteriza población de Charaña.
Ese acontecimiento provocó que entidades pertenecientes al sector del transporte de carga pesada optaran por realizar un paro indefinido con algunos bloqueos al considerar de que el funcionamiento del ferrocarril afectaría de unos 2.000 transportistas de un total de 10.000 que trabajan en el traslado de mercadería hacia puertos chilenos.
No obstante, los trabajadores de la Ferroviaria Andina protestaron en Potosí esta jornada en defensa de la reactivación del tramo férreo en consonancia a un comunicado que emitieron hace unos días, en el que aseguran que aquello «aumentará el volumen de carga» y que «no es cierto» que esto afecte al transporte pesado por carretera.
«Voy a acercarme a todos los sectores sociales, los vamos a escuchar», fue la postura del ministro Montaño tras ser consultado sobre las críticas de los empresarios del país a la medida que asumieron los transportistas de carga por carretera.
ALUSIÓN A CHILE
La reactivación del ferrocarril entre el puerto chileno de Arica y La Paz en Bolivia tiene el peso histórico del tratado de «Paz y Amistad» que firmaron ambos países en 1904 y que es una compensación a la pérdida territorial de este último tras la guerra del Pacífico a finales de siglo XIX por parte de Chile.
No obstante, personalidades chilenas como el ex secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) y actual senador José Miguel Insulza lamentaron la suspensión de prueba técnica del ferrocarril cuando justamente esa vía cumplió 108 años ayer 13 de mayo.
Ante esta declaración, el ministro boliviano de Obras Públicas remarcó que el derecho a la «libre circulación» de la mercadería boliviana hacia puertos chilenos, como refiere el tratado, «nada tiene que ver» con el conflicto del transporte en Bolivia.
Montaño aseguró que en Chile «no han concesionado» el tramo que va desde el puerto Arica hasta la chilena Visviri en la frontera con Bolivia y que en realidad Bolivia «en todas las etapas» para la operación de ferrocarril.
El ministro boliviano sostiene desde el comienzo de la tarde de este viernes una reunión con varios representantes de los sindicatos de transporte pesado en Cochabamba para lograra un acuerdo definitivo con el sector.