Montevideo, 19 abr (EFE).- Las empresas de Uruguay apostarán por una exportación más verde de la mano de un sello de gestión sostenible ideado en conjunto y presentado este jueves por la Unión de Exportadores del Uruguay (UEU) y el Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU).
Así lo aseguraron durante el acto de lanzamiento del sello «Gestión Sostenible UEU-LATU» las autoridades de ambas instituciones, quienes remarcaron la importancia de «prepararse» para hacer frente a una realidad global en la que estar comprometido con un futuro sostenible es cada vez más una exigencia.
En esa línea se expresó el presidente de la UEU, Facundo Márquez, quien indicó que la gremial conduce desde «hace más de una década» diversos programas medioambientales y resaltó que el sello será «un instrumento facilitador» para que las empresas se prepararen «para el mundo que se viene» y que ya es «una realidad» en mercados como el europeo.
«Si queremos dejar un mundo mejor para próximas generaciones necesitamos como empresas cambiar el chip, considerar aspectos que antes no eran tenidos en cuenta en la ecuación empresarial: los efectos sobre el ambiente y la sociedad y tener una adecuada gobernanza», enfatizó en alusión a los denominados factores ASG (ambientales, sociales y de gobernanza).
«Es importante que tomemos conciencia de que estamos ante una oportunidad para poder posicionarnos más rápido y mejor que otros países competidores en los productos que exportamos», destacó por su parte el director de la UEU y referente de su Unidad de Exportación Verde, Diego Wollheim.
Wollheim coincidió con el presidente del LATU, Ruperto Long, en su apreciación de que Uruguay está «bien posicionado» para afrontar este desafío, pues, según el directivo de la UEU, el país ya cuenta con «altos niveles de energía eléctrica renovable», foresta en vez de deforestar y es proveedor de «alimentos naturales y confiables».
Por otro lado, de acuerdo con el también gerente general de la papelera Montes del Plata, si bien «lamentablemente» a nivel internacional no hay «una certificación única de sostenibilidad» para exportar, el nuevo sello uruguayo no busca resolver ese problema.
«Es mucho más importante que eso, busca plantear a cada empresa una hoja de ruta para transitar el camino de la gestión sostenible y fortalecerse internamente de forma de estar preparadas para la certificación internacional que se les exija», explica.
Por último, puntualiza que si bien se espera que «en algún momento» el sello sea reconocido internacionalmente, antes hay que posicionarlo en Uruguay.