A fin de poner un punto a las cuestiones que atañen a los temas referentes al cobro del peaje en el tramo de la hidrovía Paraguay-Paraná, el canciller argentino, Domingo Peppo, comentó que el país vecino convocó a los embajadores de Paraguay, Brasil y Bolivia para este jueves a una reunión que se llevará adelante a las 10:30, en la Cancillería argentina.
De acuerdo con el canciller argentino, el punto principal de este encuentro es hacer entrega de toda la documentación que se requirió a la Argentina para justificar el cobro del peaje en la hidrovía, en donde ampliarán los papeles ya presentados por el país vecino, con el objetivo de, en función a eso, “seguir los caminos que tienen que seguir”.
“Yo creo que dentro del Tratado de Santa Cruz de la Sierra, están los mecanismos para dilucidar este tipo de situaciones y la mejor de las voluntades para trabajar en este contexto. Por eso Argentina, mañana en esta reunión, va a poner a disposición de todo lo que hace, no solo para el Paraguay, sino también para los otros países”, señaló el canciller argentino.
Argentina estipuló este cobro unilateral desde enero de este año, con una tarifa de USD 1,47 por tonelada para las embarcaciones de transporte internacional y de 1,47 pesos argentinos (0,0054 dólares) por tonelada para las cargas de cabotaje (nacional).
Al consultarle sobre la posibilidad de que Argentina sea un poco más flexible sobre el cobro del peaje, Peppo indicó que se trata de un tema que la nación viene debatiendo desde hace diez años.
“Argentina sigue teniendo los argumentos de que se están haciendo inversiones, que eso está en el orden de los USD 25 millones a USD 30 millones en forma anual y que esto hace alrededor de diez años que se viene haciendo”, comentó.
Según el sector naviero, el monto de las facturaciones por el peaje impuesto por la Argentina ya superaría los USD 11 millones y se viene acumulando desde hace nueve meses.
Un acuerdo satisfactorio
Por último, Peppo señaló que desde su país buscan encontrar una salida, “un acuerdo que satisfaga a las partes”, ya que se trata de una de las vías de comunicación más importante que se posee, por lo que recalcó que es vital “invertir y cuidar de ella”.
“Argentina no se quiere quedar con ningún peso o hacer negocio con la hidrovía, sino que lo que pretende Argentina es justamente que la hidrovía sea un lugar seguro, competitivo, y que permita la navegación de los 365 días, día y noche”, expresó el embajador argentino.
