En su reporte “Juventud Desigual: un reto para el desarrollo del Cono Sur”, el BID señala que este fenómeno afecta especialmente a las mujeres, lo que refleja una amplia brecha de género y también socioeconómicas.
En un contexto general, el informe detalla que en el Cono Sur más de 8,5 millones de jóvenes no estudian ni trabajan (NiNis), y casi 6 millones tampoco buscan empleo (NiNiNis). Aunque la incidencia de los NiNis es menor en esta región que en el promedio de América Latina, sigue siendo superior a la de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Puntualmente, en el 2022, la proporción de jóvenes de 15 a 24 años que no estudian ni trabajan fue del 17% en Paraguay, con un 13% clasificado como NiNiNis. Este porcentaje es mayor al promedio de la OCDE.
No obstante, es importante señalar que al referirnos a esta categoría no precisamente hablamos de personas inactivas pues, según los datos revelados, en el Cono Sur, promediando cifras de nuestro país, Chile y Brasil, el 86% realiza labores domésticas, el 52% se dedica al cuidado de familiares y el 39% busca empleo. En este aspecto, las mujeres dedican más tiempo a las tareas del hogar, mientras que los hombres tienden a buscar trabajo más activamente.
BRECHA DE GÉNERO
El estudio del BID resalta que la mayoría de los NiNis son mujeres, especialmente en el rango de 20 a 24 años, donde la proporción casi duplica la de los hombres. En Paraguay, esta brecha es más amplia que en países como Argentina o Chile.
Concretamente, la proporción fue del 15% en Argentina (10% NiNiNis), del 21% en Brasil (14% NiNiNis), del 15% en Chile (10% NiNiNis), del 17% en Paraguay (13% NiNiNis) y del 16% en Uruguay (10% NiNiNis).
Un aspecto relevante que subraya el organismo internacional es que las mujeres jóvenes en uniones formales o informales son particularmente más vulnerables: su probabilidad de ser NiNis triplica la de aquellas que son solteras, separadas o viudas. Este grupo suele encargarse de tareas no remuneradas como la crianza de niños, el cuidado de familiares dependientes y la realización de tareas del hogar.
En Paraguay se encuentra que los NiNis son quienes destinan más horas al día a labores domésticas y al cuidado de familiares (5,9 horas frente al promedio regional de 3,6 horas entre los jóvenes), siendo las mujeres las que más tiempo le dedican (7,4 horas).
DESIGUALDADES SOCIOECONÓMICAS Y ÉTNICAS
Las desigualdades económicas también juegan un rol importante. En el Cono Sur, los jóvenes de los hogares con menores ingresos tienen casi el triple de probabilidad de ser NiNis en comparación con aquellos del quintil más alto. Esta disparidad es aún mayor en América Latina y el Caribe.
Por otro lado, las brechas étnico-raciales también son significativas. Los jóvenes indígenas y afrodescendientes tienen una mayor probabilidad de no estudiar ni trabajar, siendo las mujeres de estos grupos las más afectadas. En Brasil y Uruguay, casi un tercio de estas mujeres son NiNis, una tendencia que probablemente también se observa en Paraguay.