Es así que Paraguay, a través del programa de mejoramiento del Instituto de Biotecnología Agrícola (Inbio), viene implementando la tecnología HB4, un gen que permite a los cultivos de la oleaginosa hacer frente a las situaciones de estrés hídrico. Pero ¿cuál es su función específica?
Omar Paredes, responsable de Comercialización y Difusión del Programa de Semillas del Inbio, explicó que el gen HB4 se obtiene a partir del girasol y es incorporado a otras plantas para generar mayor resistencia a la sequía.
“Activa un mecanismo fisiológico y prepara al organismo de la planta antes de que la sequía golpee más fuerte. Esto permite que no pierda tanta agua. También hace que, luego de la primera lluvia posterior a la sequía, su metabolismo pueda responder más rápido”, detalló.
Además, citó que otro factor beneficioso de esta variedad es que también genera tolerancia al glufosinato de amonio, un herbicida que controla las malezas que atacan las plantas. El desarrollo de este gen en Paraguay nació de una alianza internacional con la empresa argentina Bioceres en el año 2018.
EN CULTIVOS DE INVIERNO
Si bien su implementación ya se dio en cultivos de soja, tiene un proceso muy incipiente en lo que respecta al cultivo de trigo. Se estima que en un futuro cercano, de cuatro a cinco años, si cumple con las reglamentaciones relacionadas con semillas, se podrán tener variedades de trigo listas para ser producidas y comercializadas.
El Inbio había informado que el desarrollo de la tecnología HB4 lleva más de 20 años de evaluaciones. El trigo HB4 fue sometido a una caracterización profunda, que confirmó su seguridad, y su equivalencia agronómica, composicional y nutricional con el trigo no-transgénico.
“Cabe destacar que para que una tecnología genéticamente modificada (GM) sea aprobada para su comercialización en Paraguay, pasa por un proceso de evaluación de riesgos que incluye aspectos ambientales, de alimentación humana y animal, e inocuidad. Todo este proceso es en forma comparativa con su par no genéticamente modificado”, subrayaron.
Los resultados de estos estudios han sido presentados ante las diversas agencias regulatorias. Durante los procesos de evaluación completados por las mismas, se realizaron los estudios adicionales requeridos, y todos ellos han confirmado la seguridad del trigo HB4. Es así que a lo largo de los últimos años, el trigo HB4 fue aprobado en 10 países, como Estados Unidos, Australia, Nueva Zelandia, Brasil, Indonesia, entre otros.