Sao Paulo, 8 nov (EFE).- El estado brasileño de Amapá (norte) continuó este domingo con el racionamiento de energía tras cinco días de apagón en la región, una situación que ha obligado el despliegue de las Fuerzas Armadas para transportar 51 toneladas de material con el fin de minimizar el caos.
El corte en el servicio de energía se produjo la noche del martes tras un incendio en una subestación que dejó sin luz a 14 de los 16 municipios de la región, incluida la capital Macapá, aunque el Gobierno informó la víspera que el 65 % de la energía ya ha sido restablecida.
Según dijeron a Efe algunos testigos, el caos continúa instalado en algunos municipios de Amapá, donde prosiguen las filas para comprar hielo y agua, ya que debido a la falta de luz las bombas que la llevan hasta las casas dejaron de funcionar.
Los vecinos también han relatado un fuerte aumento en los precios de los alimentos y de la gasolina, lo que ha provocado protestas en los últimos días en diferentes partes del estado, principalmente en los barrios más periféricos.
«Hay una sensación térmica de 40 grados, hace falta hielo y agua. Hay muchas personas que continúan sin energía y que lo han perdido todo, con alimentación precaria», dijo a Efe un residente de Macapá.
La justicia brasileña dio un plazo de tres días para que la empresa responsable por la subestación restablezca por completo la energía en Amapá, estado fronterizo con la Guayana Francesa y Surinam y que cuenta con una población cercana a las 900.000 personas.
Tras un pedido del senador Randolfe Rodrigues, la justicia determinó que la multinacional española Isolux, que se declaró en quiebra en 2017, restablezca la energía en tres días, ante la amenaza de pago de una multa de 15 millones de reales (unos 2,7 millones de dólares).
No obstante, Isolux ya no es más la controladora de la empresa Líneas de Macapá Transmisora de Energía (LMTE), responsable de la subestación de la capital de Amapá que presentó los problemas. LMTE fue adquirida el año pasado por una compañía que pertenece al fondo Starboard.
El senador Randolfe Rodrigues aclaró a Efe que cuando presentó la acción contra Isolux ante la Justicia no sabía que LMTE había sido adquirida por otra empresa, lo que le fue notificado este domingo. Asimismo, precisó que los detalles de quien es el responsable último deberá ser esclarecido mañana por el Gobierno ante la justicia de Amapá.
El legislador recordó que la falta de abastecimiento de energía se produce en momentos en los que el estado enfrenta una «segunda ola» de covid-19, que ya ha dejado 750 muertos y más de 53.000 casos en Amapá.
«La situación es insoportable. Estamos en medio del verano amazónico, sin aire o ventilador, todo el mundo está en las calles y sin agua, lo que dificulta la higiene, lo que debe agravar la pandemia», dijo a Efe el senador.
A su juicio, el restablecimiento de una parte de la energía ha «minimizado el caos, pero la situación sigue siendo caótica».