El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) anunció que movilizará USD 1.000 millones para apoyar a los países de América Latina y el Caribe a adquirir y distribuir vacunas contra el COVID-19.
Los fondos complementarán los USD 1.200 millones en recursos que el BID ha comprometido en el 2020, así como otros recursos ya programados para el 2021.
El objetivo es “apoyar a los planes a salvar vidas a través de medidas de salud pública, como pruebas y rastreos más efectivos, y una mejor gestión clínica de pacientes con COVID-19”, explicó la entidad, en un comunicado.
El apoyo del BID incluye la gestión para la compra de dosis de vacunas a través de esfuerzos multilaterales como la Facilidad COVAX, de la cual forma parte Paraguay.
Además, se contempla el fortalecimiento institucional para ayudar a los países a desarrollar mecanismos efectivos para el despliegue de vacunas; y las inversiones para fortalecer la capacidad de inmunización y financiar los costos operativos.
El organismo multilateral asegura que trabajará en estrecha colaboración con otras instituciones, como la Organización Panamericana de la Salud (OPS), y que está reforzando su llamado a los gobiernos para redoblar los esfuerzos en la preparación de sus planes nacionales de despliegue y vacunación.
Novedades de procesos en el plano local
La gestión para la adquisición de la vacuna en Paraguay recibió esta semana el impulso de la sanción del Proyecto de Ley “Que modifica los artículos 24 y 30 de la Ley N° 4.621/2012 – Nacional de Vacunas”.
Se trata de una normativa que permitirá un régimen más flexible de adquisición de estas sustancias exclusivamente durante la pandemia, a fin de contar con alternativas para la inmunización de la población contra el COVID-19, según explicó la Cámara de Diputados.
El documento se encuentra en instancias del Poder Ejecutivo para su promulgación y brindará alternativas para la compra de vacunas por fuera del Fondo Rotatorio de la OPS.
Avances vitales para la recuperación económica
El presidente del BID, Mauricio Claver-Carone, destacó la importancia de ser “audaces y proactivos” en las decisiones que se tomen para alterar el curso de la pandemia, ya que de esto dependerá la recuperación de la región de Latinoamérica – la más golpeada por la emergencia sanitaria –. “Los próximos meses serán críticos”, aseveró el ejecutivo.
“El BID está listo para apoyar el aseguramiento de una implementación exitosa en la región”, concluye, a su vez, el pronunciamiento institucional.