Quito, 20 jun (EFE).- La primera semana de las protestas contra el Gobierno de Ecuador por la carestía de la vida impidió producir unos 78.000 barriles de petróleo en todo el país al ser tomadas varias instalaciones petroleras por los manifestantes, según datos oficiales difundidos este lunes.
De esos 78.000 barriles que se dejaron de producir, 64.000 son de campos operados por la petrolera estatal Petroecuador y otros 13.000 de empresas privadas, apuntó en rueda de prensa el subsecretario de Exploración y Explotación de Petróleo y Gas Natural del Ministerio de Energía y Minas, Ramón Correa.
«Lo preocupante son las tendencias. Ayer eran 62 los pozos paralizados y hoy 237», remarcó Correa, que cifró en unos 7,6 millones de dólares el valor de los barriles de crudo que se han dejado de producir.
El funcionario señaló que esta cifra será mucho mayor el martes, ya que desde la noche del domingo la petrolera argentina Pluspetrol ha paralizado todo su campo en la provincia amazónica de Orellana, con un total de 28 pozos que producían unos 12.000 barriles al día.
PÉRDIDA DE 29.000 BARRILES POR DÍA
Por su parte, el gerente general de Petroecuador, Ítalo Cedeño, advirtió que, si bien la pérdida acumulada de la empresa estatal es de unos 64.000 barriles, la afectación a la producción a este lunes es de unos 29.000 barriles por día, todos ellos por tomas de instalaciones en los yacimientos de la Amazonía ecuatoriana.
En ese sentido, Cedeño estimó que, si la situación se mantiene igual, la producción de la compañía pública caerá a los 128.000 barriles diarios para el 30 de junio, cuando hace poco había logrado superar la barrera de los 400.000.
«En producción y exploración habíamos quebrado una declinación galopante de muchos años. Habíamos revertido esa tendencia y rebasamos los 400.000 barriles por día y ahora tenemos que dar un paso atrás», lamentó Cedeño.
«El precio del petróleo en estos momento tiene récord histórico. No producir un barril de petróleo es un crimen. Cada barril cuenta», agregó.
DENUNCIAS SIN DETENIDOS
El gerente general de Petroecuador también señaló que se han producido 124 incidentes en vías dentro de sus zonas de operación, como el corte de árboles milenarios para bloquear las carreteras, motivo que les ha llevado a poner 20 denuncias por sabotajes sin que hasta ahora haya «ningún detenido».
«Si no hay un escarmiento y penalidades, van a volver a ocurrir. Cuando se indultan y amnistían a los responsables de las paralizaciones, es el peor de los ejemplos: la impunidad, igual que en la corrupción»; dijo Cedeño sobre las amnistías otorgadas por la Asamblea Nacional (Parlamento) a los procesados por las protestas de octubre de 2019, que se saldaron con una docena de fallecidos y unos 1.500 heridos.
El viernes pasado, el Gobierno estimó en 50 millones de dólares la afectación de las protestas a los sectores productivos, con unos 2 millones de dólares diarios para el sector turístico.
PROTESTA SIGUE EN PIE
Las protestas comenzaron el pasado lunes convocadas por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) para demandar al Gobierno la congelación de los precios de aquellos combustibles que están liberalizados, el control de precios de productos esenciales, la condonación de deudas de familias campesinos y una moratoria a las nuevas concesiones mineras, entre otras exigencias.
Pese a que el presidente Guillermo Lasso ha concedido varias de esas demandas, el movimiento indígena mantiene la protesta, se niega a dialogar y quiere concentrar la movilización en la capital Quito, como un desafío al estado de excepción que decretó el mandatario desde el sábado.