Según cifras publicadas por el Banco Central del Paraguay (BCP) en su boletín estadístico del sistema financiero, la cartera general de créditos en bancos cerró septiembre con un volumen de G. 134 billones, o sea, unos USD 18.432 millones al tipo de cambio considerado por la banca matriz para ese periodo. Esta cifra representa una expansión del 11% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Cabe mencionar que en el mes anterior, es decir, al cierre de agosto de este año, la cartera de créditos presentaba un volumen de G. 131 billones, con un crecimiento también del 11% con respecto al mismo periodo del año anterior. De esta manera, se puede ver que, por dos meses consecutivos, la cartera de préstamos bancario se expandió en la misma proporción.
También vale apuntar que en el mismo mes pero del año pasado, o sea, al cierre de septiembre del 2022, la cartera de créditos presentaba un volumen de G. 121 billones. En ese momento, se registraba un crecimiento del 15% con respecto a los primeros nueves meses del año 2021. Se puede ver así que en este orden viene la expansión de la cartera a nivel general.
Sin embargo, al desglosar los créditos entre los sectores económicos en particular, se ve una importante desigualdad entre los niveles de crecimiento en las carteras. Si bien la actividad económica que presentó mayor nivel de aumento relativo con respecto a septiembre del año pasado fue el cultivo de algodón (178%), esta cartera es pequeña con respecto a los volúmenes que se operan en el mercado.
De entre las carteras que tienen cierta relevancia en el sistema, las de servicios financieros y ventas/mantenimiento de vehículos fueron las de mayor expansión, con crecimientos del 62% y del 28% respectivamente. La cartera de servicios financieros llegó así a un volumen bruto de G. 2,1 billones, mientras que la de venta y reparación de vehículos llegó a los G. 5,9 billones, según los registros.
Las carteras para vivienda y construcción tuvieron desempeños importantes y se ubicaron entre las de mayor expansión al cierre de septiembre, también por encima del promedio del 11% de la cartera general. Concretamente, con un volumen de G. 6,2 billones, la primera mencionada tuvo una expansión del 22% al cierre de septiembre; mientras que la segunda se expandió 18,4%, llegando a los G. 4,7 billones.
Por otra parte, las carteras para industrias y servicios también presentaron crecimientos cercanos al promedio general del crédito, al noveno mes del año. Así, la cartera para el sector manufacturero se expandió un 13,6%, llegando a la línea de los G. 13 billones, mientras que la cartera de créditos para el sector terciario creció un 9%, según el reporte del Banco Central del Paraguay.
Otras carteras que presentaron expansión, aunque en menor medida, fueron las de Comercio al por mayor (7,4%), Comercio al por menor (5,1%), cría de animales (5%) y servicios personales (3%). En este punto, cabe mencionar que a pesar de que la expansión del sector de comercio al por mayor no fue muy elevada, en términos relativos el volumen es el mayor del sistema, con G. 18 billones.
Uno de los sectores más importantes para la economía paraguaya es el del cultivo de soja. Sin embargo, en el periodo analizado, la cartera de créditos para este segmento tuvo una merma del 4,4% con respecto al mismo periodo del año anterior. Dicha cartera está compuesta por un volumen que actualmente supera los G. 8 billones.
Esta retracción en la cartera de créditos en la soja podría deberse a una cuestión estacional de la agricultura, ya que otras actividades relacionadas también tuvieron mermas en sus carteras. Por ejemplo, la cartera de cultivos de arroz tuvo una contracción del 1,2%, mientras que la de cultivos de trigo cayó un 54% y la categoría de “cultivos agrícolas en general” tuvo una reducción de 6,3%.
En lo que respecta a la morosidad de las carteras, al cierre de septiembre, la de mayor nivel de deudas fue la de consumo, como es natural, al ser de alto riesgo y elevadas tasas de interés. La morosidad en este segmento fue de 5,83%; seguida por la morosidad en el comercio al por menor, que fue de 5,44%. En tercer lugar, la cartera de servicios personales presentó una morosidad de 4,32%.
Por el contrario, la cartera de agribusiness fue la de menor morosidad, con un 1,49%, mientras que la cartera de cría de animales presentó una morosidad del 1,57% y la de industrias, un 1,85% en este indicador.
Recordemos que la economía paraguaya se está recuperando este año del bajo dinamismo que dejó en el 2022 el impacto de la sequía. Tras haberse prácticamente estancado, con una variación de apenas 0,1% el año pasado, el producto interno bruto (PIB) se expandirá a un ritmo de 4,5% en el 2023, según proyecciones del BCP.