Durante una entrevista otorgada a MarketData, el presidente de la Asociación de Bancos del Paraguay (Asoban), Raúl Vera Bogado, destacó la necesidad que tiene el Estado de llevar a cabo las reformas pertinentes que terminen por mejorar la calidad del gasto público para poder apuntalar un crecimiento económico certero para los próximos años.
Hizo referencia a los acuerdos políticos a los que deberá llegar el Poder Ejecutivo con las Cámaras del Congreso para llevar hacia adelante los cambios que se vienen planteando desde hace tiempo.
Además, Vera Bogado reflexionó sobre otras cuestiones como el Presupuesto Público, la reciente incorporación de las cooperativas al cálculo de tasas por uso de tarjetas de crédito y la extensión de la flexibilización de refinanciaciones bancarias hasta junio del 2021.
– ¿Cómo ve la composición del Presupuesto General de la Nación (PGN) 2021 con miras hacia la reactivación económica?
Consideramos que la ejecución fiscal tendrá muchas presiones en el 2021, pero confiamos en los anuncios del Ministerio de Hacienda, que tendrán rigor en la ejecución del plan financiero de todas las instituciones sujetas al PGN. Para que la ejecución del Presupuesto tenga una convergencia efectiva hacia niveles más sostenibles del ritmo de endeudamiento y para una mayor eficiencia y calidad del gasto, será vital que el Poder Ejecutivo obtenga el respaldo necesario del Parlamento para aprobar las reformas que hoy son imperativas para un Estado más eficiente.
Las últimas dos décadas de gestión macroeconómica nos han enseñado que las reformas económicas son claves para reactivar el crecimiento económico y reducir la pobreza. Ahora debemos encarar con fuerza la reforma en contrataciones públicas para mejorar la calidad de los gastos y reducir los excesos improductivos y los márgenes discrecionales; debemos impulsar una reforma del sistema de pensiones para movilizar eficientemente los recursos de largo plazo en un momento crucial para impulsar las inversiones en nuestra economía; y debemos fortalecer la ley de responsabilidad fiscal para una convergencia más ordenada que permita además encarar más eficazmente en el futuro el impacto de los ciclos económicos negativos.
Hemos aprendido los beneficios de la prudencia macroeconómica en los últimos 20 años, pero ahora debemos asegurarnos trabajar para que la recuperación que todos anhelamos conlleve una mayor inclusión social, para lo cual la eficiencia en el gasto público y el impulso a la iniciativa del sector privado para crear empleos son pilares de un consenso amplio que hoy ya existe.
«La gradualidad será importante para que la recuperación económica no pierda impulso antes que se observen indicadores de un mayor y más estable dinamismo».
– ¿Cree usted que la reciente modificación del tope para tasas por uso de tarjetas de crédito incidirá directamente en el mercado, subiendo las tasas y costo para los clientes en este segmento? Teniendo en cuenta que el consumo sigue todavía golpeado por la pandemia.
Con respecto a la unificación del cálculo de las tasas de interés de referencia para las tarjetas de créditos, consideramos que es una medida correcta que elimina asimetrías que existían en el sistema financiero, y además el impacto potencial no será significativo teniendo en cuenta los bajos niveles de tasa de interés vigente, que a lo largo del 2020 se han reducido sustancialmente para todos los segmentos de clientes y sectores económicos.
– El BCP anunció que las medidas excepcionales para el refinanciamiento se extienden hasta junio del 2021 ¿En qué medida colabora esta política con la recomposición de la economía?
En cuanto a la extensión de las medidas que han beneficiado al crédito en el sistema bancario, creemos que es una muy buena decisión del Banco Central y por sobre todo muy prudente, pues permitirá dar espacio para una consolidación de la demanda de créditos que se ha observado en aumento en los últimos meses del presente año, y permitirá una mejor adecuación de todos los sectores económicos ante diferencias en su ritmo de recuperación, de modo a no inhibir el auspicioso dinamismo gradual que se está percibiendo. Concretamente, esto podría permitir una gradualidad mayor para todos los sectores económicos para absorber más eficientemente el impacto de la pandemia.
«Hemos aprendido los beneficios de la prudencia macroeconómica en los últimos 20 años, pero ahora debemos asegurarnos trabajar para que la recuperación que todos anhelamos conlleve una mayor inclusión social».
– En lo que respecta a la política monetaria y considerando que se espera una inflación cercana al 4% para el año que viene ¿Considera adecuado que la tasa de referencia del BCP siga en el mismo nivel actual durante el 2021?
En línea con las regulaciones de carácter crediticio, creemos igualmente acertada la decisión de mantener estable la tasa de referencia de política monetaria, considerando que no existen presiones inflacionarias y que ha demostrado ser efectiva para inducir una reducción transversal en todos los productos y sectores económicos de los niveles de tasas de interés. Creemos que el BCP continuará monitoreando estrechamente el dinamismo económico y la tendencia de precios internos para tomar decisiones oportunas, pues la gradualidad será importante para que la recuperación económica no pierda impulso antes que se observen indicadores de un mayor y más estable dinamismo.
Perfil
Nombre: Raúl Vera Bogado
Formación profesional: Economista y máster en Economía Política.
Trayectoria: Fue presidente y gerente general del Banco Central del Paraguay (BCP), ministro de Industria y Comercio y jefe de la Misión Paraguaya ante la Unión Europea. Es presidente ejecutivo del Banco Regional.
Reformas del Estado en proceso
Una de las más importantes es la reforma para procesos de compras públicas del Estado, cuya necesidad fue resaltada por el propio titular de Hacienda, Oscar Llamosas, al asumir su cargo en noviembre de este año.
Esta propuesta de forma, básicamente, busca mejorar la calidad del gasto y reducir el déficit fiscal a través de un mejor aprovechamiento de los recursos, ya que las compras públicas han sido históricamente una “fuga” como consecuencia de la burocracia y la corrupción.
Transparentando las licitaciones y la ejecución de los contratos, se podría generar un importante ahorro para redireccionar las inversiones hacia otros sectores importantes como educación y salud; o incluso más obras públicas.
Por otra parte, en el marco del plan de recuperación económica, el nuevo ministro de Hacienda mencionó en su momento que está hecha la propuesta de reforma del servicio de la carrera civil, para mejorar la calidad en los procesos de la función pública que ocupa una parte muy importante del Presupuesto General cada año.
Recientemente se han aprobado otras reformas como la tributaria para la simplificación de los impuestos y la formalización, así como se aprobó la ley de administración de pasivos, la cual permitirá al Ejecutivo negociar las deudas anteriores para buscar tasas de interés más convenientes. Sin embargo, la ejecución de estas reformas todavía queda en el “veremos” y los resultados serán medidos con el tiempo.
