Tras una reunión del equipo técnico encargado del análisis y revisión del Anexo C, realizada ayer martes y presidida por el presidente de la República, Santiago Peña, las autoridades nacionales brindaron detalles sobre el avance de las negociaciones con Brasil en una conferencia de prensa.
El ministro de Industria y Comercio, Javier Giménez, destacó que el proceso continúa a buen ritmo y se encuentra en una etapa avanzada. Explicó que se realizaron varias jornadas de trabajo técnico entre los equipos de Paraguay y Brasil, desarrolladas los días 18, 19, 28 y 29 de noviembre, y el 10 y 11 de diciembre.
Según detalló, estas reuniones se llevaron a cabo en la sede de Itaipú Binacional, con la participación de representantes del Ministerio de Industria y Comercio, el Ministerio de Relaciones Exteriores y técnicos de la entidad binacional.
El ministro aclaró que estos encuentros son de carácter técnico y no constituyen una negociación oficial del Anexo C, ya que dicha tarea corresponde a las altas partes y al canciller nacional. Sin embargo, subrayó que se están sentando las bases para facilitar el diálogo diplomático.
El secretario de Estado también mencionó que durante estás reuniones, se abordaron temas relacionados a la estructura de la tarifa, la posible disminución de los gastos sociales y la necesidad de nuevas fuentes de generación de energía en Paraguay, ya que el país se enfrenta a un aumento en el consumo energético.
Al ser consultado sobre los avances en las negociaciones, el titular del MIC destacó que el proceso técnico registra un avance del 70% al 80%. “Existen más coincidencias que divergencias”, indicó, citando al ingeniero Félix Sosa, presidente de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE). Las diferencias restantes representan aproximadamente el 20% de los puntos a resolver, y se espera alcanzar un acuerdo técnico en los próximos días.
El ministro indicó que existe el compromiso de concluir el proceso antes del 31 de diciembre, sin embargo, el objetivo es contar con un Anexo C fortalecido, «por lo que no debemos dejar que el tiempo nos apure en esa misión», añadió.
El alto funcionario también habló sobre la importancia de optimizar los gastos sociales y priorizar la inversión en nuevas fuentes de generación de energía para garantizar el crecimiento económico sostenible del país. “Paraguay es un país exportador de energía, pero el crecimiento orgánico proyectado del 6,5% anual nos obliga a pensar en nuevas obras y fuentes de generación”, señaló.
Consultado sobre las opciones para ampliar la capacidad energética del país, el ministro mencionó que Paraguay apunta a diversificar sus fuentes de energía renovable, sin descartar alternativas como la generación térmica. “Además de paneles solares, consideramos aumentar la capacidad de las centrales hidroeléctricas mediante el reemplazo o adición de nuevas máquinas”, explicó.
Finalmente, destacó el interés del presidente Santiago Peña en explorar nuevas fronteras energéticas, como la energía solar, cuya implementación se espera para los primeros meses del próximo año. “Nuestro compromiso es garantizar la seguridad energética con una matriz diversificada que asegure el desarrollo del país”, concluyó Giménez.