En el último informe publicado por el banco Itaú, denominado “Escenario Macro”, se observa un ajuste al alza en el pronóstico del tipo de cambio para el cierre de este año, que pasó de G. 7.300 a G. 7.400 desde la anterior estimación.
Vale mencionar que en octubre, el tipo de cambio presentó un nivel de volatilidad que obligó al Banco Central del Paraguay (BCP) a ingresar al mercado cambiario mediante operaciones compensatorias para cortar picos.
De acuerdo con los datos del BCP, el pico más elevado que alcanzó el dólar, usando la cotización promedio calculada por la propia banca matriz, fue de G. 7.447 en fecha 23 de octubre.
Teniendo en cuenta la volatilidad que viene mostrando el tipo de cambio en este mes, los riesgos de un encarecimiento puntualizado de productos importados o bienes durables podrían empezar a verse y formarían parte de los desafíos para el cierre de la inflación para este año.
En este contexto, Itaú mantuvo su pronóstico de inflación 2023 en 3,8% -por debajo de la meta de 4% del BCP-, pero haciendo la salvedad de un riesgo hacia el posible encarecimiento de la energía, es decir, combustibles.
“Revisamos nuestro pronóstico de tipo de cambio para finales de este año reflejando un dólar global más fuerte. Ahora esperamos un tipo de cambio de 7.400 PYG/USD, en comparación con nuestro escenario anterior de 7.300 PYG/USD”, relata la entidad.
“Nuestra previsión de inflación para este año se mantiene sin cambios en el 3,8%. Los precios más altos de la energía son un riesgo al alza para nuestra estimación”, agrega.
Inflación
En el informe también se explica que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) aumentó un 0,5% mensual en septiembre (frente al -0,08% del año anterior y la mediana cinco años del 0,3%), por encima de su previsión del 0,0% y del consenso del mercado del 0,1% (según la encuesta del BCP).
Los precios de los alimentos y la energía ejercieron la mayor parte de las presiones alcistas, así como el índice de bienes y servicios. El IPC subyacente x1 (excluye frutas y verduras, precios de servicios regulados y combustibles) se situó en el 0,4% (desde el 0,6% hace un año y la mediana de cinco años del 0,3%), mientras que el índice subyacente total se situó en el 0,5% (desde el 0,2% hace un año y una mediana de 5 años del 0,3%), recuerda el reporte de Itaú.
En términos interanuales, la inflación general y la inflación subyacente total aumentaron al 3,5% en septiembre (desde el 2,9% en agosto) y a 3,7% (desde el 3,3%), respectivamente. “Observamos que tanto la inflación general interanual y la inflación subyacente total se mantienen dentro del rango objetivo de inflación del 4%+-2%”, aclara.
Tasa de interés
Con relación a la tasa de política monetaria (TPM), el informe recuerda que luego de que el directorio del Banco Central del Paraguay (BCP) recortó por unanimidad la tasa de política en 25 puntos básicos a 8% en septiembre, por segundo mes consecutivo, se destacó que la inflación general ha continuado en una trayectoria descendente, mientras que las expectativas de inflación se han ajustado al centro del rango meta (4%) para todos los horizontes analizados.
Es importante destacar que el comunicado de prensa reiteró que los riesgos potenciales provienen del escenario internacional, en particular debido al reciente aumento de los precios del petróleo. La política monetaria sigue siendo contractiva: la tasa de política real ex ante se estima en 4% en septiembre (utilizando las expectativas para el horizonte de política monetaria), en comparación con un rango neutral de tasa real de 0,9%-1,4%.
La proyección sobre la tasa de política monetaria para el cierre del 2023 sigue ubicándose en 7,25%, al igual que en el escenario anterior.
PIB
Con relación al crecimiento económico, Itaú afirma que aumentó un 5,9% interanual en el segundo trimestre, frente al 4,9% del primero. La cifra general anual sigue estando respaldada por una normalización en la agricultura (46,6% en el segundo trimestre del 2023, desde el 52,7% en el primer trimestre del 2023), así como en los sectores de generación de electricidad y agua (19,5%, desde el 22,8%) después de una grave sequía el año pasado.
El crecimiento del producto interno bruto (PIB) excluyendo dichos sectores se situó en el 2,6% interanual en el segundo trimestre, desde el -0,5% en el primer trimestre. Los sectores de servicios y manufactura también mejoraron, creciendo un 3,4% interanual en el 2T23 (desde el 1,8% en el 1T23) y un 2,8% (desde -2,2%), respectivamente.
Por otro lado, la producción ganadera (-1,4%) y la construcción (-4,8%) se mantuvieron débiles en el segundo trimestre, aunque esta última se recuperó respecto del trimestre anterior (-13,8%).
“Utilizando nuestra propia serie desestacionalizada, el PIB creció un 0,9% trimestral en el segundo trimestre después de expandirse a un sólido 2,6% en el trimestre anterior, lo que eleva el remanente estadístico al 4,2% para este año”, destaca Itaú.
Al igual que en el informe anterior, se espera que el PIB cierre el 2023 en 5,6% y que en el 2024 continúe por la senda del crecimiento pero a un ritmo del 3,5%.
Con relación al déficit fiscal Itaú mantuvo su proyección para el 2023 en un nivel de 4,1% al igual que en el escenario anterior.