La reapertura de la frontera con Brasil, luego de más de seis meses de estar cerrada, representa una expectativa alentadora para el comercio de frontera y las importaciones bajo el régimen de turismo.
Sin embargo, también instala el riesgo que correrá nuestro país respecto a una posible suba de contagios por COVID-19, atendiendo a la alta tasa de contagiados en el vecino país, según coinciden técnicos del Banco Central del Paraguay (BCP) y la consultora Mentu.
La habilitación del paso fronterizo por el Puente de la Amistad está fijada para este jueves 15 de octubre, según informó en conferencia el viernes pasado el asesor de la Presidencia de la República, Federico González. Este adelantó que en esa fecha el presidente Mario Abdo Benítez y el mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, se encontrarán en un punto del Puente para el acto de reapertura.
Buenas expectativas. Desde el Banco Central, Gustavo Cohener, director de Estadísticas del Sector Externo, manifestó que la reapertura del paso fronterizo con Brasil genera expectativas muy positivas y alentadoras sobre el comercio de esa zona, y sobre las importaciones bajo el régimen de turismo.
“Como vimos, las condiciones (con caídas de las importaciones bajo el régimen de turismo y las reexportaciones) se han mantenido estables a pesar de ciertas mejoras en las medidas que se habían tomado en Ciudad del Este (cuarentena estricta). Estamos todavía cayendo en las reexportaciones en torno al 46%, en términos acumulados hasta setiembre del 2020”, mencionó el técnico.
En el mismo sentido, recordó que justo durante el mismo periodo del 2019 – en los meses de octubre, noviembre y diciembre –, las importaciones de productos bajo el régimen de turismo (para la venta en frontera) también habían repuntado. Indicó que la proyección es que este año pase lo mismo.
“De todos modos, en las condiciones actuales, creemos que esta apertura de la frontera puede beneficiar y mejorar para el cierre del año el comportamiento que se ha tenido hasta ahora”, recalcó.
Riesgos. Miguel Mora, economista jefe del BCP, por su parte agregó que se debe reconocer que hay un riesgo sanitario asociado a la apertura de la frontera. “Evidentemente esto va a requerir de medidas sanitarias y un estricto autocontrol por parte de los comercios, de tal manera a seguir las recomendaciones del Ministerio de Salud y evitar brotes que se puedan constituir en un obstáculo”, insistió el especialista.
Las expectativas de los técnicos de la banca matriz se alinean con el informe de la Consulto Mentu, del economista Hugo Royg, donde se señala que la reapertura de frontera aliviará en parte las dificultades económicas en esa zona del país, pero que también generará un riesgo de un mayor contagio, que puede ser identificado como una desventaja.
“Así también, la competitividad de Brasil y Argentina, a causa de una mayor depreciación de sus monedas frente al dólar, podría contribuir a que el nivel de contrabando aumente con la reapertura”, añade.
El informe de la mencionada consultora detalla que hasta agosto de este año, las importaciones de mercaderías bajo el régimen de turismo disminuyeron en un 35,3%, frente al mismo periodo del 2019. Este hecho es culpabilizado al cierre de fronteras que impide el ingreso de turistas al país, repercutiendo, además, sobre los ingresos de personas y empresas.
En el segundo trimestre del 2020, el 76,4% de los hogares de Alto Paraná reportó una disminución de los ingresos; el 53,9% tuvo problema para pagar sus deudas, créditos o alquileres; y el 49,9% reportó inconvenientes para conseguir trabajo o iniciar un negocio, según el reporte de Mentu, que cita como fuente a la Encuesta Permanente de Hogares Continua.
