La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) elevó 0,2 puntos la proyección de crecimiento del PIB regional para 2024, del 1,9% estimado en el mes de diciembre del 2023, al 2,1% para este año.
Sin embargo, el organismo de las Naciones Unidas advirtió que la expansión se mantiene en la senda de bajo crecimiento.
Según nuevas estimaciones dadas a conocer, América del Sur crecerá 1,6%, mientras que América Central y México un 2,7%. Por su parte, el Caribe (excluyendo Guyana) crecerá un 2,8%.
“El gran desafío es cómo avanzar hacia un crecimiento más alto, dinámico e inclusivo», indicó la Comisión de la ONU en su publicación.
La Cepal proyecta un crecimiento del 3,8% para el PIB de Paraguay a finales del 2024, esta cifra coincide con las del crecimiento esperado por parte de otros agentes económicos como el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, el Banco Central del Paraguay (BCP) e Investor (4%).
IMPACTO
Conforme a las nuevas estimaciones del organismo internacional, la región está enfrentando un escenario complejo caracterizado por un crecimiento de la actividad económica y el comercio global por debajo de sus promedios históricos.
Al respecto, la Cepal enfatizó que todo lo anterior, junto con tasas de interés que permanecen altas en los países desarrollados, “redundan en mayores costos de financiamiento para los países emergentes, incluida la región”.
Respecto al ámbito interno, Cepal aseguró que la tendencia a la baja de la inflación dio espacio para que los bancos centrales de varios países implementen disminuciones en sus tasas de interés de política monetaria, a partir de lo cual se podría esperar un impacto favorable sobre la actividad económica.
Sobre el punto, recordemos que Paraguay realizó durante ocho meses consecutivos, una disminución desde el 8,5% al 6% en la tasa de referencia.
Siguiendo con los impactos, el organismo sugiere que las crecientes tensiones geopolíticas están llevando al mundo hacia un fuerte reacomodo de las cadenas de valor.
“Durante el 2024 los mercados globales estarán marcados por varios factores de riesgos”, aseguró Cepal.
Por otro lado, todavía persiste el riesgo de que los aumentos en los precios de productos básicos retrasen la baja de tasas de interés de política por parte de los principales bancos centrales, con efectos negativos para el crecimiento económico mundial.
“Junto a lo anterior, si las tasas de interés permanecen elevadas por más tiempo, podrían aumentar aún más las vulnerabilidades por la carga de deuda en varias economías emergentes y en desarrollo; y también la vulnerabilidad del sector financiero en los países desarrollados”, aclara la Comisión de la ONU.
El bajo crecimiento esperado en 2024, «no es solo un problema coyuntural, sino que refleja la caída de la tasa de crecimiento tendencial del PIB regional», aclaró el organismo internacional.
ESTIMACIONES
Las estimaciones hechas por el organismo de las Naciones Unidas, muestran que la región sudamericana crecerá 1,6% en 2024, mientras que Centroamérica y México un 2,7%; y El Caribe (excluyendo Guyana) experimentará una expansión del 2,8%.
Latinoamérica, considerada la región más desigual del mundo por varias organizaciones internacionales -como la PNUD, el Banco Mundial, el BID y otros-; y la más afectada por la pandemia del COVID-19, creció un 6,9% en el 2021.
Este rebote se dio tras el desplome del 6,8% registrado en el año 2020, considerada como la mayor recesión en 120 años.
La desaceleración que se experimentó en la región, inició en el segundo semestre de 2022, que cerró con un crecimiento estimado del PIB regional del 3,7%. Por su parte, el año pasado la proyección de crecimiento cerró en 2,2%.
En ese contexto es que la Cepal espera que la inflación mediana de la región baje al 3,2% en 2024, inferior al 3,8% registrado en el ejercicio anterior.
La valoración de la Comisión indica una crisis de desarrollo, que se verá caracterizada por el bajo crecimiento, la desigualdad y la baja movilidad social; así como la baja capacidad institucional y de gobernanza ineficaz.
«Estas trampas condicionan y limitan la consecución de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas y por tanto, la consecución de un desarrollo social inclusivo», advirtió el organismo.
DESAFÍOS
Para dinamizar el crecimiento de la región, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, insistió en que se debe incrementar la productividad y aumentar la inversión de capital físico y humano, “para ello, la región no solo debe invertir más, sino que debe invertir mejor”, enfatizó.
Según las recomendaciones de la organización, es clave adoptar nuevas tecnologías, promover iniciativas de clusters y buenas prácticas de negocios.
Por otro lado, consideró indispensable fomentar mejoras en el proceso de acumulación de capital y aprovechar adecuadamente el capital social y ambiental de las economías.
Finalmente, Cepal identificó al menos 15 sectores que tienen potencial para impulsar o dinamizar la economía para un crecimiento más sostenible e inclusivo.
La región necesita invertir en diversas áreas que son críticas para incrementar la productividad, infraestructura, telecomunicaciones, digitalización, investigación y desarrollo.
Así mismo, requiere mejoras significativas en programas de salud y una adecuación a los sistemas educativos para responder a los cambios que la digitalización y automatización suponen para los mercados de trabajo.
