Liliana Alcaraz, ex fiscal con 24 años de experiencia en la carrera del Ministerio Público, fue anunciada ante medios de prensa como la próxima ministra de la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero o Bienes (Seprelad).
El anuncio fue realizado por Carlos Fernández Valdovinos, designado como ministro de Hacienda por el presidente electo, luego de una reunión mantenida en la residencia de Santiago Peña.
En su presentación, Alcaraz afirmó que la prioridad a corto plazo será cumplir con los últimos requerimientos de la evaluación llevada adelante por el Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat) a nuestro país.
La abogada es recordada por haber intervenido en varias investigaciones del Ministerio Público, entre ellas el caso de Darío Messer, sonado por su vinculación con el expresidente Horacio Cartes.
“Para mí es un honor seguir desempeñando una función pública. Desde mis inicios, he sido designada como agente fiscal, tengo 24 años de experiencia y concretamente me he especializado en lo que es corrupción, lavado de dinero y financiamiento al terrorismo en todos estos años. Acepté la designación y para mí va a ser un honor seguir trabajando por el Paraguay”, afirmó a medios de prensa.
Al ser consultada sobre las prioridades que tendrá en su agenda, habló del periodo de seguimiento en el que se encuentra nuestro país luego de la evaluación del Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica; y que se deberán cumplir los plazos y tener cuidado con los últimos detalles en este proceso.
Añadió que la idea es reunirse en el corto plazo con el actual ministro de Seprelad, René Fernández, y los coordinadores de cada área en lo que respecta a la evaluación para poder cumplir con los requerimientos y sugerencias del ente, de manera a poder estar a la altura de las expectativas del organismo multilateral.
“Me encuentro en condiciones de volcar toda esa experiencia que he tenido en el Ministerio Público para seguir trabajando por un Paraguay mejor”, expresó.
Reconoció que nuestro país ha sido uno de los centros en la región para el lavado de dinero, pero afirmó que se debe trabajar en consecuencia para fortalecer todas las instituciones y poder desarrollar tareas de manera coordinada. Reiteró que si bien el país ha pasado la evaluación de Gafilat, esta línea de trabajo debe seguir más allá del proceso internacional.