Gobernanza participativa, descentralización de los servicios públicos, diálogo y alcanzar acuerdos políticos, mejorar la calidad de vida de la población, el crecimiento económico sostenible y una inserción internacional estratégica.
Estos son algunos de los objetivos del presidente de la República, Santiago Peña, quien ayer juró como jefe de Estado y dio su primer mensaje a la nación paraguaya.
El mandatario aseguró que una gestión efectiva es esencial para lograr resultados que «se sientan en los bolsillos y en las mesas de las familias paraguayas».
En este sentido, afirmó que se asegurará de administrar eficientemente los recursos de nuestra nación, implementar políticas y programas que beneficien a todos los ciudadanos, y garantizar una rendición de cuentas rigurosa.
“Nuestro país se rige por la Constitución Nacional, que establece un Estado Social de Derecho con el objetivo de construir una gobernanza que garantice el acceso de toda la población a servicios públicos de calidad, la plena vigencia de los derechos fundamentales, el crecimiento económico sostenible y la gobernabilidad para asegurar la paz pública y una inserción internacional estratégica”, resaltó.
En otra parte de su discurso, mencionó que en materia de lucha contra la pobreza quiere guiarse por la sabiduría del Papa Francisco, quien señala: “frente a los pobres no se hace retórica, sino que se ponen manos a la obra y se practica la fe involucrándose directamente, sin delegar en nadie”.
En este punto, dijo que la intención de su gobierno es que funcione una red de protección social, evitando la dispersión y la duplicación, factores que han sido propicios para que ronde “el fantasma de la corrupción”.
Santiago Peña enfatizó que el foco de la lucha contra la pobreza es la persona vulnerable, no un «conglomerado de instituciones paquidérmicas que acumulan licitaciones, generan clientelismo y despachan prebendarismo».
«Cuanto más focalizado, efectivo y recto sea el camino, la ayuda llegará con más efectividad a las personas más vulnerables”, añadió.
Agregó que el objetivo final no es mantener a compatriotas en la vulnerabilidad, sino apoyarles en la mejora de su calidad de vida y de su capacidad de progresar por sus propios medios.
Acceso a un mejor empleo
El presidente de la República indicó que en materia de políticas económicas, las personas «no nos guiamos por los indicadores macroeconómicos, sino por el dinero en el bolsillo, por las oportunidades de acceder a un mejor empleo, por las posibilidades de ahorrar e invertir en comodidades para la familia o en un futuro mejor para nuestros hijos».
“La clave para que el crecimiento llegue a la gente es el acceso a empleo de calidad, que no solo brinde seguridad social, sino que ofrezca oportunidades de desarrollo y bienestar para los trabajadores”, sostuvo.
Adelantó que es necesario generar por lo menos 500.000 nuevos empleos de calidad para atender la demanda de la población y el crecimiento anual de nuevos ingresantes a la fuerza laboral.
Sobre este punto, dijo que desde el gobierno van a promover la creación de estos puestos de trabajo con el sector privado, lo que supone un «gran esfuerzo de coordinación interinstitucional y territorial y de articulación con el sector productivo».
En esta línea, añadió que el Ministerio de Economía será el responsable de formular, coordinar y supervisar las políticas económicas del Estado, con el objetivo de promover el desarrollo económico sostenible y la generación de empleo; impulsar la competitividad y la productividad de los diferentes sectores económicos, y de establecer medidas para la protección de los consumidores.
“En materia de políticas económicas, no somos ni seremos un centinela sentado sobre una caja fuerte. Si fuera así, apenas empataríamos al final de la gestión. Seremos generadores creativos de factores como el incentivo a las industrias, a la radicación de inversiones, las innovaciones tecnológicas, la empleabilidad y productividad laboral para lograr el gran salto económico que nuestra población se merece”, concluyó.