Según Bloomberg, los precios de los bonos del Tesoro cayeron mientras las acciones también experimentaban turbulencias debido a la preocupación de los inversores por la perspectiva de tasas de interés de la FED y el aumento de los precios del petróleo.
El dólar continuó su ascenso durante el sexto día consecutivo. El rendimiento de los bonos a 10 años cotizó por encima del 4,6%, alcanzando su nivel más alto desde 2007, en medio de preocupaciones sobre la disminución de las reservas de petróleo y las presiones inflacionarias sobre los consumidores.
En cuanto a los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años, experimentaron un aumento de 7 puntos básicos, llegando a un 4,61%. Por su parte, los bonos del Tesoro alemán a 10 años subieron cuatro puntos básicos, ubicándose en un 2,84%.